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LEGISLACIÓN

Un tercio de los estados de la ONU aplica restricciones contra la homosexualidad

Alrededor de 70 de los 193 países miembros siguen criminalizándola con castigos como la pena de muerte

Un tercio de los estados de la ONU aplica restricciones contra la homosexualidad
Un tercio de los estados de la ONU aplica restricciones contra la homosexualidad
EFE

MADRID.- Pese a que este domingo se cumplieron 30 años desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dejó de considerar la homosexualidad como una enfermedad mental, un tercio de los países miembros de la ONU aplica una legislación muy restrictiva contra esta práctica sexual, que en algunos casos se castiga con la pena de muerte.

Alrededor de 70 de los 193 estados miembros de la ONU siguen aplicando restricciones o medidas coercitivas contra la homosexualidad, que en algunos casos concretos se castiga con la pena capital en Arabia Saudí, Irán, Sudán y Yemen, así como en ciertas provincias de Nigeria y Somalia, de acuerdo con datos la ILGA, la organización transnacional que representa a la comunidad LGTBI en todo el mundo.

En seis estados miembros de la ONU (Afganistán, Brunei, Catar, Emiratos Árabes Unidos, Mauritania y Pakistán) la legislación contra la homosexualidad es también muy represiva y potencialmente podría incluir asimismo la pena de muerte contra quienes la practican, si bien no hay constancia de que se aplique en la actualidad, de acuerdo con la ILGA. Más allá de estos casos, que se circunscriben muy concretamente al mundo árabe e islámico, la homosexualidad también está restringida, penalizada y discriminada en varias decenas de países.

En contrapartida, la homosexualidad está considerada legal en 123 estados de la ONU y en un aproximadamente la mitad de ellos existe legislación específica para proteger los derechos del colectivo LGTBI, ya sea en el terreno de la lucha contra la homofobia o la discriminación, en la adopción de medidas socioparentales sobre el matrimonio o la adopción de niños.

El pasado día 15, el Parlamento Europeo (PE) inauguró en su sede de Bruselas un punto de información LGTBI, que actuará como "estrella polar" en su lucha contra la discriminación y la violencia que sufre ese colectivo.

En una rueda de prensa con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, el europarlamentario y vicepresidente de la Eurocámara Fabio Massimo Castaldo defendió esta medida aduciendo que la UE "está siendo demasiado indulgente con los ataques contra la comunidad LGTBI producidos en algunos Estados miembros", y se refirió concretamente a Polonia y Hungría, países gobernados por partidos de signo ultraconservador y ultranacionalista.

El alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, señaló que el club europeo "rinde homenaje a la diversidad humana en toda su riqueza, y al derecho de toda persona a estar orgullosa de quienes son, a definir su propia identidad y a amar a la persona que elija"

CHINA Y SUR DE ASIA

En China, la homosexualidad es legal desde 1997 y fue desclasificada como enfermedad mental en 2001, aunque entre sus ciudadanos es común que muchos la perciban con extrañeza.

Desde la organización defensora de los derechos humanos China Human Rights Defenders, Leo Lan cuenta a Efe que "queda mucho hasta que los derechos LGTBI se respeten" en China.

Entretanto en Taiwán se cumplió este domingo un año desde la legalización del matrimonio homosexual, el primer país de Asia en hacerlo, mientras que en Hong Kong Amnistía Internacional denuncia que no existe legislación contra "la discriminación basada en la orientación sexual, la identidad de género o la expresión de ésta".

La situación de la comunidad LGTBI continúa siendo complicada en la mayoría de los países del Sur de Asia, aunque ha habido cambios. El Tribunal Supremo de la India consideró inconstitucional el artículo 377 del Código Penal, que condenaba con penas de prisión las relaciones "contra natura". El artículo sigue vigente en Pakistán y Bangladesh, donde la homosexualidad se castiga con penas de cárcel que pueden llegar a la cadena perpetua.