Julio Peinado, voluntario de Cruz Roja Monzón: "Sobre todo es sentirte realizado al hacer cosas por los demás"

¿Qué le llevó a ser voluntario?

-Llevo 32 años en Cruz Roja. Cuando se acabó la mili obligatoria, al pasar a los objetores, necesitaban conductores para ambulancias con varios carnets. No había mucha gente y yo no venía del Ejército, pero llegué aquí y un amigo, César, me dijo que no tenían conductores y me metí y aquí sigo. Me ha gustado siempre colaborar, echar una mano. Siempre he colaborado con la gente, creo que lo llevo en los genes. Ahora, con el coronavirus, he hecho de todo menos ambulancia por una situación especial. He hecho llamadas, seguimiento de mayores, compras de comida y medicamentos, reparto de material escolar, tarjetas para móviles para familias que tenían muy pocos datos y no podían teletrabajar. Todo estos con mis compañeros. Nunca habíamos hecho tanto. Es muy satisfactorio, hemos hecho casi mil llamadas de seguimiento a mayores, incluso a gente que necesitaba hablar porque estaba sola. Te sientes lleno, muy bien.

¿Por qué motivo escogió esta entidad?

-Me llamó mi amigo César porque necesitaban conductores y me he sentido bien todos estos años.

¿Qué le reporta esta labor?

-Creo que a lo largo del tiempo todo. Egoístamente, todos los cursillos. Por ejemplo, tengo dos hijos y el pequeño, cuando era niño, tocó una vez un tubo de escape y se abrasó. Mi reacción fue rápida y no tuvo ampollas ni nada. Eso fue gracias a los cursos. Por otro lado, está la satisfacción de ver que la gente lo agradece. Llamas a los abuelos y ver cómo agradecen que te acuerdes, que hables con ellos, que les hagas la compra... Llena y es una satisfacción.

¿Por qué animaría a otras personas a hacerse voluntarias?

-Por lo mismo de antes. Además, estos días han entrado 6 ó 7 nuevos voluntarios y 3 de ellos quieren hacerse voluntarios de pleno derecho ahora. Sobre todo es sentirse realizado al hacer cosas por los demás.