Josan Bailac: "Tengo tiempo para escribir porque no puedo ejercer mi trabajo"

HUESCA.- Josan Bailac ha aprovechado el confinamiento por la pandemia de covid-19 para trabajar en un campo, la literatura, que no es el suyo, el humor. En 35 días escribió su primera novela, "El sueño de Aylan", de 174 páginas y prologado por el periodista Cristian Mestres. Es editada por Círculo Rojo, "la primera editorial con la que hablé, que la valoró muy positivamente, me dijeron que tenía una estructura formidable y que estaba bien redactada".

Explica que "tenía en mente escribir algo, pero no sabía qué escribir, si sobre las actuaciones que hacemos con mi compañero Gabriel por todo Aragón, que tenemos anécdotas de todos los pueblos, que también sería interesante porque involucras a mucha gente, o sobre fútbol, que es mi otra pasión, y al final en el confinamiento me vino la creación y he escrito una novela que un poquito más de la mitad es autobiográfica y otro tanto, ficción para enganchar al lector".

Cuenta la historia de "un niño de 11 años que vive en un pueblo de la Toscana que bien podría ser Alquézar o Roda de Isábena; un niño que tiene dificultades, que vive con su tía porque su madre no puede con él, no porque sea un mal niño sino porque la vida de su madre está muy desestructurada, y no tiene otra cosa en la cabeza que el fútbol. Es 1993, la Liga italiana es entonces la más potente del mundo y...".

"Lo mejor de todo es que es una historia con un final abierto, o sea que va a haber segunda parte porque ya la tengo en la cabeza".

Destaca Josan Bailac la portada del libro, "que es íntegramente hecha por gente de aquí. La foto la hizo mi hermana María, que es fotógrafa; el niño que hace de Aylan es un alumno mío que se llama Marcos Torres; el fondo, que parece la Toscana, es Bodega Blecua, de Viñas del Vero, en Barbastro, y la réplica de la camiseta de la Fiorentina la han confeccionado mis amigos de Bemiser, desde Zaragoza".

Independientemente del resultado de ventas de esta su primera novela, dice Bailac que no dejará el humor, aunque "vienen tiempos duros para las cosas que son en directo".

"Escribir requiere tiempo, y tengo tiempo porque no puedo ejercer mi trabajo, y creo que seguiré escribiendo y tratando de dar continuidad a esta historia, que quiero que el niño se haga mayor. Cuando acaba la novela tiene doce años y medio, y aún queda para que se haga mayor".

Por otro lado, después de haber estrenado en enero el show nuevo, "El maño y el fato", explica que "teníamos previsto un muy buen verano, sobre todo en agosto que es nuestro mes fuerte, aunque los meses de contratación más fuerte eran marzo y abril, y se nos han caído muchísimas cosas, aunque también están saliendo otras".

Donde vayan, pues, irán con sus shows habituales y una novedad, un autocine que llevarán por diferentes localidades con la empresa de Fraga Tejera Studios. Antes de la película, "con Gabriel hacemos una intervención disfrazados de Torrente y Barragán ("Acomodados") y hacemos de acomodadores, improvisamos con la gente...".