Sociedad

IGLESIA

El Vaticano anima a dar voz a todos los afectados por la pandemia

La institución religiosa insta a desafiar a las "fuerzas" que quieran silenciar a las víctimas

La Asociación "Huesca, Cuna de San Lorenzo" organiza un viaje a Roma
La Asociación "Huesca, Cuna de San Lorenzo" organiza un viaje a Roma
EFE

ROMA.- El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso (PCID) del Vaticano han publicado un documento conjunto en el que analizan las consecuencias económicas y sociales de la pandemia e invitan a dar voz a las personas que se han visto afectadas así como a desafiar a "cualquier fuerza" que quiera silenciarlas.

"Encontrar maneras de dar testimonio del sufrimiento, llamar la atención sobre él y desafiar a cualquier fuerza que pretenda silenciar o excluir la voz de los heridos y vulnerables entre nosotros, haciendo responsables a las personas y estructuras que están detrás de este sufrimiento", se lee en el documento publicado por la oficina de prensa del Vaticano durante la jornada de este jueves.

Esta es una de las propuestas del informe titulado "Servir a un mundo herido en la solidaridad interreligiosa: Un llamado cristiano a la reflexión y a la acción durante covid-19".

En la práctica, se pretende que todas las iglesias y organizaciones cristianas reflexionen sobre la importancia de la solidaridad interreligiosa en un mundo herido por la pandemia covid-19.

El documento ofrece una base cristiana para la solidaridad interreligiosa que puede inspirar y confirmar el impulso de servir a la sociedad en un momento de grave crisis económica mundial. Según ha señalado el Vaticano, la publicación está diseñada también "para ser útil a los practicantes de otras religiones, que ya han respondido a covid-19 con pensamientos similares basados en sus propias tradiciones".

En el texto, se reconoce el contexto actual de la pandemia como un momento para descubrir nuevas formas de solidaridad para repensar el mundo posterior a covid-19. Está dividido en cinco secciones cuya base matriz es la reflexión sobre la naturaleza de una solidaridad sostenida por la esperanza. También ofrece una base cristiana para poner en marcha una solidaridad interreligiosa que se estructure en torno a unos pocos principios clave y a un conjunto de recomendaciones sobre la forma en que la reflexión sobre la solidaridad puede traducirse en medidas concretas y creíbles.