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JUSTICIA

Manuel Ollé: "Nadie está exento de pagar por graves crímenes"

El abogado barbastrense ha investigado durante quince años la matanza de Ignacio Ellacuría y otros quince jesuitas españoles en El Salvador

Manuel Ollé: "Nadie está exento de pagar por graves crímenes"
Manuel Ollé: "Nadie está exento de pagar por graves crímenes"
S.E.

BARBASTRO.- "Nadie está exento de pagar por graves crímenes, sea Jefe de Estado, Ministro o Coronel", indica el barbastrense Manuel Ollé, prestigioso abogado penalista que ha investigado durante 15 años la matanza de Ignacio Ellacuría y otros quince jesuitas españoles en El Salvador. Los hechos ocurrieron el 16 de noviembre de 1989 y el tribunal de la Audiencia Nacional que ha juzgado el asesinato del ideólogo de la Teoría de la Liberación y de sus compañeros, ha condenado al ex coronel y ex viceministro de Seguridad Pública de El Salvador, Orlando Montano, a la pena de 133 años y tres meses de cárcel. Además de a los sacerdotes españoles, ejecutaron a otro jesuita, a la mujer y la hija del guardia.

En declaraciones a Diario del Alto Aragón, tras conocerse la sentencia el viernes pasado, Ollé destaca las reacciones mundiales, "después de 48 horas de la lectura pública, comienzo a ser consciente de la importancia que ha debido tener por las reacciones que veo de grandes académicos de universidades de todo el mundo, juristas, personas anónimas y organizaciones de derechos humanos. Y por supuesto de los medios de comunicación nacionales e internacionales. Yo aún no soy consciente de ello".

El abogado residente en Madrid aceptó la defensa del caso con su compañera Almudena Bernabeu a quien considera "gran defensora de derechos humanos. En el año 2008 llevaba 15 años de investigaciones científicas sobre el Derecho Penal Internacional, como abogado acumulaba experiencia en procesos internacionales y ello me llevó, con Bernabeu, a iniciar este porque era un reto inédito".

En esta línea, "tras bucear en los océanos de las normas tuvimos la suerte de construir una jurídica que fraguó. Era imprescindible que los jesuitas, que Elba y Celina, y también el pueblo salvadoreño tuvieran justicia y conocieran la verdad de lo sucedido". Añade, "tenga presente que era un caso de criminalidad de Estado. Las masacres las decidían y ejecutaban desde los poderes del Estado. El propio Estado y las Fuerzas Armadas de El Salvador han procurado, siempre, el encubrimiento y la impunidad de los autores. Hoy siguen sin reconocer los hechos y sin pedir perdón".

En cuanto a la lectura que debe hacerse de una sentencia tan dura, "nadie está exento de pagar por graves crímenes, sea Jefe de Estado, Ministro o Coronel, da igual". Respecto a la posibilidad de continuar con los militares restantes que participaron en la matanza, "la verdad de esta sentencia debe obligar, necesariamente, a las autoridades salvadoreñas a que cumplan sus obligaciones de enjuiciamiento de todos los responsables de estos crímenes concretos. Pero ¡ojo! también a los autores de otras masacres que se produjeron en aquella época de guerra civil en El Salvador donde se torturaba, masacraba o se hacían desaparecer a las personas".

Manuel Ollé es el abogado de las Madres de la Plaza de Mayo en Argentina y consiguió que la Justicia de España condenara al ex represor argentino Adolfo Francisco Scilingo a 1.084 años de presión por su participación en los "vuelos de la muerte" durante la dictadura militar. Reconoce que "es complicado y trato de aprender cada día. Después de los principios de Nuremberg donde parecía que el Derecho penal internacional nacía pero se congeló por la guerra fría. Esta ciencia que, en los últimos 25 ó 30 años comienza a resurgir, hoy es un bebé que debemos cuidar y mimar para que continúe sana y fuerte. Hay muchos Estados y dirigentes que pretendían aniquilarla para evitar la posibilidad de ser juzgados".

"MARCA ESPAÑA EN JUSTICIA"

Resalta la imagen que tiene la Justicia española a nivel internacional con estas sentencias y condenas ejemplares, "en mi opinión, la marca España se hace también en la justicia. Y este proceso, sin duda, la pone en alza. Ojalá nuestro poder legislativo y ejecutivo devuelvan a nuestro país la ley de justicia universal que tuvimos para enjuiciar este tipo de casos".

Por último, valora la reacción de los jesuitas y de los familiares de las víctimas, 31 años después de los hechos, "de nuevo me han dado otra gran lección. Están satisfechos, no por las penas impuestas al viceministro y coronel Montano, sino porque se ha conseguido la verdad y conlleva una garantía de no repetición de esas barbaries. Los padres jesuitas lo han dicho con claridad que seguirán con el trabajo para alcanzar una realidad en El Salvador, donde el amor, la reconciliación y la justicia sean valores esenciales".