Sociedad

ENTREVISTA

Eva Antón Bravo: "Me llama la atención la humanidad de figuras como los maniquíes"

La escritora y fotógrafa bilbilitana afincada en Castejón de Sos expone en Casa Heredia de Graus su colección "París, vitrine"

Eva Antón Bravo: "Me llama la atención la humanidad de figuras como los maniquíes"
Eva Antón Bravo: "Me llama la atención la humanidad de figuras como los maniquíes"
S.E.

GRAUS.- La escritora y fotógrafa bilbilitana afincada en Castejón de Sos Eva Antón Bravo expone hasta este domingo día 20 de septiembre en la grausina Casa Heredia París, vitrine", una muestra de fotografía digital que plasma la "humanidad" de los maniquíes inertes de un escaparate de París, excusa también para mostrar la ciudad. En su primer proyecto fotográfico y tras haber autopublicado dos poemarios con notable éxito en los últimos años, Antón apuesta por los puentes que unen disciplinas y conceptos en una concepción trasversal del arte.

París, vitrine es una muestra que nace de las fotografías tomadas durante su estancia en París. "Me llamó la atención la humanidad que tienen unas figuras inertes como son los maniquíes. Como están desnudas, reflejo también la sensualidad y, en el caso de los niños, la inocencia. A través del escaparate -prosigue- se funden el interior y el exterior con balcones, luces y edificios de París", detalla.

Las 18 imágenes de esta exposición instalada en Casa Heredia, en la plaza Mayor de Graus, son en su mayoría en blanco y negro y están hechas sobre tela de lienzo. "Tienen más plasticidad, es una mezcla de pintura y fotografía", precisa Antón respecto a la técnica que "aporta más matices plásticos".

La respuesta ante París, vitrine está siendo muy positiva. "He expuesto en Castejón de Sos, en el centro Cultural y en Casa Tintorero, antes de Casa Heredia, y a la gente le gusta, le sorprende. Hay figuras inquietantes, muy trabajadas digitalmente, y otras más dulces, con juegos de luces y sombras", indica.

Esta artista polifacética a la que la docencia llevó a Castejón de Sos, se confiesa "fotógrafa aficionada" y resalta su labor como escritora, aunque cercana a la imagen en sus textos. Por el momento, ha autopublicado dos poemarios con su sello editorial, creado recientemente. "En mi poesía, hay una parte muy visual. Hago poesía visual y fotografía poética", explica apostando por una concepción transversal del arte. "No hay tantas barreras ni límites entre las cosas. Todas están unidas y a mí lo que me interesan son los puentes, unir disciplinas, unir conceptos".

Su primer poemario, Camas de faquires, está compuesto por micropoemas que pretenden remover conciencias. "Hay amor, problemática social, crítica social". El segundo, titulado Momento de una Fuerza, abunda como la exposición París, vitrine en su estancia en París, "la época francesa, la sensación de extranjera", evoca. El humor está muy presente en su obra, así como la cercanía. "La poesía que hago es muy popular. Utilizo un lenguaje sencillo y verso libre", apunta en su afán por llegar, conmover, remover y entretener en estos tiempos convulsos.

Sus nuevos proyectos parecen adentrarla en el campo de lo visual y su mirada poética se dirige ahora la putrefacción de los alimentos, "fotografía visual podrida", la define la autora y la imaginería. "Esa dualidad entre lo humano y lo divino", concluye.