Sociedad

LA ENTREVISTA

Víctor Jiménez, director de Cía. Lamov: "Quiero hablar de lo rápido que pasa todo y el tiempo que vivimos"

El director de la compañía trae su "Tempus Fugit" a la Feria de Teatro y Danza

Víctor Jiménez, director de Cía. Lamov: "Quiero hablar de lo rápido que pasa todo y el tiempo que vivimos"
Víctor Jiménez, director de Cía. Lamov: "Quiero hablar de lo rápido que pasa todo y el tiempo que vivimos"
A.R.

HUESCA.- Que el tiempo vuela es algo que ya se sabía, pero quizás ahora -tras los meses vividos- más que nunca exista una consciencia sobre la fugacidad de la vida, del "cómo estamos, cómo evolucionamos y cómo nos vamos", explica Víctor Jiménez, director y coreógrafo de la compañía Lamov, que trae el espectáculo Tempus Fugit, que se representará este lunes en el auditorio del Palacio de Congresos de Huesca (22 horas), en el marco de la XXXIV Feria Internacional de Teatro y Danza de Huesca.

Un propuesta de danza con la que Jiménez quiere hablar "de lo rápido que se pasa todo y del tiempo que vivimos". Una reflexión que, si se realiza teniendo en cuenta el momento actual, arroja la imagen de cómo, tras el confinamiento, "nos hemos visto envueltos en que el tiempo se ha parado y la vida seguía" y ahora "estamos a rebufo, intentando recuperarlo".

Tempus Fugit tiene una puesta en escena en la que péndulos en movimiento, "que se iluminan, que se balancean", llevarán al espectador "a un universo muy especial", añade el director de la compañía, en el que ocho bailarines pondrán el cuerpo al servicio de la una coreografía a ritmo de Vivaldi y sus Cuatro Estaciones en "una versión muy moderna" revisada por Max Richter y Jorge Sarnago. "Todo eso -explica Jiménez- se ha plasmado con una técnica muy física de los bailarines, una velocidad extrema, una vertiginosidad de los movimientos, que es lo que les hace peculiares. Los bailarines entran, empiezan a moverse y acaban exhaustos".

En ese huir del tiempo, también existe oportunidad para fijarse en lo que cada quien deja a su paso y Jiménez deja, a su vez, "la propuesta y la interrogante" para que cada espectador "se ubique en el momento determinado de su vida". Aun así, Jiménez, señala, "vamos dejando el amor, la juventud, está claro, gente, pero también vamos encontrando otras cosas".

Por ello invita a quien acuda a ver el espectáculo a predisponerse a disfrutar de la belleza que propone en Tempus Fugit. "Que el espectador se empape de belleza, de luz preciosísima, de belleza, que le lleve a soñar esa noche, y que salgan del espectáculo con una sensación placentera" provocada por "lo que le ha entrado por los ojos y lo oídos", añade el coreógrafo.