El reto de Coca-Cola: un mundo sin residuos

Hace tiempo ya que Coca-Cola decidió pasar de las palabras a los hechos y ha seguido dando pasos en su estrategia de sostenibilidad. La compañía pretende generar un movimiento a favor del cambio, con la sostenibilidad como aspecto central y prioritario, no sólo en sus consumidores, sino también con clientes y colaboradores. Además de diferentes campañas promovidas por la compañía para recogidas de residuos en playas, entre otras, ahora Coca-Cola busca también que todos sus envases estén fabricados con material reciclado o reutilizable en 2025. Un reto ambicioso, pero no imposible.

¿Cómo? Desde 2020, en Coca-Cola están llevando a cabo acciones que ayudan a reducir el uso de las materias primas vírgenes, sustituyéndolas por material reciclado. De hecho, el 100% de las botellas de plástico PET de medio litro son ya de material reciclado y terminaron el año 2022 con el 50% en todo el porfolio. Además, en Coca-Cola plantean, para un futuro no muy lejano, soluciones de envases rellenables, reutilizables o incluso modelos nuevos en el mercado sin envase, como, por ejemplo, dispensadores. De esta manera, pretenden conseguir la menor cantidad de materiales y envases innecesarios posibles, y además, buscan asegurarse de que el 100% de sus envases primarios sean reciclables o reutilizables.

“Somos conscientes del reto que suponen los envases. No queremos ver como ninguno de nuestros envases acaba donde no debería y es por ello que estamos haciendo una apuesta decidida por la economía circular” asegura Fernando Anel, Jefe de Comunicación de Coca-Cola.

Por eso, están eliminando todos los envases difíciles de reciclar y, en su defecto, la compañía está creando envases más ligeros para utilizar así menos plástico y tener menos huella de carbono. Además, están reemplazando los film de plástico y las agrupaciones de latas por agrupadores de cartón, con lo que, a finales de 2021, eliminaron hasta 4.000 toneladas de plástico.

Nuevos diseños

En materia de envases no deja de innovar, lo que incluye también la inversión en tecnologías de despolimerización. Asimismo, Coca-Cola investiga nuevos diseños que tengan un efecto positivo y contribuyan al reciclaje, como la nueva botella con el tapón adherido. Una serie de medidas que buscan acelerar el desarrollo de sus objetivos a largo plazo para convertirse en una empresa cero emisiones.

Por otro lado, este año se cumple el 70 aniversario de la primera botella de vidrio fabricada en España, y Coca-Cola quiere celebrarlo redoblando su apuesta por su envase más icónico y sostenible. Este es el envase que provee de la mejor experiencia de consumo y el más sostenible para la hostelería.