METEOROLOGÍA
El regreso de la nieve complica la circulación en las carreteras de montaña
Las estaciones de esquí lucen por fin una estampa blanca, acorde con las fechas actuales
Los pronósticos meteorológicos se han cumplido y el Pirineo oscense ha amanecido este jueves blanco en muchos puntos de la cordillera. Una buena noticia para las estaciones de esquí altoaragonesas, que ya han anunciado su inminente apertura. En la cara menos amable de la moneda, el tráfico, ya que la nieve está complicando la circulación en algunos tramos de las carreteras de montaña.
Durante buena parte de la mañana ha sido obligatorio el uso de cadenas o neumáticos de nieve en la A-136a, durante tres kilómetros entre Sallent de Gállego y Formigal. También en la A-2606, entre Panticosa y los Baños de Panticosa, así como en la A-138, a la altura de Chisagües y en la A-135, entre Lanuza y la frontera del Portalet. Además, se ha prohibido el paso de vehículos pesados y en algunas carreteras de montaña las restricciones continúan.
El descenso de la cota de nieve hasta los mil metros ha vestido de blanco las estaciones de esquí altoaragonesas. En Candanchú, por ejemplo, en torno a las nueve de la mañana tenían un espesor acumulado de 30 centímetros en la pista grande y los termómetros marcaban -2 grados.
Algo similar ocurría en la estación de Formigal del Grupo Aramón, donde la zona de Anayet también luce espesores considerables.
La previsión meteorológica para las próximas horas indica que la cota de nieve irá subiendo hasta los 1.400 metros al final del día.
