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El escándalo Villarejo, la "trampa" que amenaza la reputación del BBVA

La entidad pagó 5 millones de euros, supuestamente, para diversos seguimientos

El escándalo Villarejo, la "trampa" que amenaza la reputación del BBVA
El escándalo Villarejo, la "trampa" que amenaza la reputación del BBVA

MADRID.- 26 de septiembre de 2018. El BBVA comunica el cese de Francisco González como presidente ejecutivo, relevo que se haría efectivo apenas meses más tarde, en enero, coincidiendo con el que va camino de ser uno de los episodios más críticos de la historia de la entidad.

Antes, en mayo, el diario Público se había hecho eco de los presuntos servicios que el banco habría encargado al excomisario José Villarejo, en prisión por presunta organización criminal, blanqueo y cohecho, desde el 1 de junio de 2016 a diciembre de 2017. La polémica estaba servida.

Casi 365 días después, las sospechas obran en el inabarcable sumario de la "operación Tándem" sobre los negocios del policía, caso que instruye el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, y que, al menos desde comienzos de año, cuenta con una pieza separada, la novena, dedicada a este asunto.

Las pesquisas se remontan a 2004, cuando el BBVA habría encargado presuntas tareas de espionaje al grupo Cenyt, epicentro empresarial de Villarejo, a fin de frenar el intento de la constructora Sacyr de tomar el control del banco.

Entre las labores prestadas, por las que la entidad supuestamente desembolsó unos cinco millones de euros entre 2004 y 2005, estaría el seguimiento de políticos, empresarios y periodistas, a los que además se habría intervenido hasta 15.000 llamadas telefónicas.

Nombres como el del exministro de Industria Miguel Sebastián o el del exvicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Carlos Arenillas comenzaron a filtrarse como perjudicados por un espionaje que ambos denunciaron el pasado febrero.

El creciente revuelo y los continuos rumores de una posible imputación provocaron la reacción del BBVA, que reconoció haber iniciado una investigación sobre la contratación del Grupo Cenyt. Pero también del propio Francisco González, que decidió dar un paso atrás y entregar de forma temporal la presidencia de honor del banco.