Illa aconsejó antes del 8-M anular un acto religioso

MADRID.- El ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, advirtieron pocos días antes del 8-M a los organizadores de un congreso evangélico previsto para mediados de marzo en Madrid de que este acto no se debía realizar bajo ningún concepto por ser un evento de alto riesgo de contagio de coronavirus. Así consta en el informe de la Guardia Civil encargado por la juez de Madrid Carmen Rodríguez-Medel, que investiga la actuación del delegado del Gobierno, José Manuel Franco, al autorizar el 8-M.

Los investigadores relatan lo declarado en dependencias policiales por tres representantes de entidades evangélicas en España que se reunieron con responsables del Ministerio días antes del evento. Tal y como contaron representantes evangélicos a los investigadores, tanto Illa como Simón afirmaron que debían suspender el evento. Jorge Fernández Basso, uno de los representantes evangélicos, añadió que cuando les comunicaron su estimación de asistentes al congreso, unas 8.000 personas, Illa "acompañó con gestos negativos en su cabeza la frase "no, eso no se puede hacer"". Según explicó Fernández Basso, Sanidad hizo una "recomendación" para que suspendieran el evento ya que "reunía todos los riesgos", como la alta presencia de personas procedentes del extranjero reunidas en un espacio cerrado.