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CRISIS MIGRATORIA

Unos 8.000 migrantes entran en Ceuta en dos días de crisis

Pedro Sánchez visita las ciudades autónomas y el Rey se interesa por la situación

Soldados del Ejército de Tierra observando a un grupo de inmigrantes que llegaban a la costa de Ceuta.
Soldados del Ejército de Tierra observando a un grupo de inmigrantes que llegaban a la costa de Ceuta.
Efe

Ceuta esperaba a última hora de este martes en calma tensa una nueva jornada tras la entrada masiva de 8.000 personas desde este lunes, en una inédita situación para la ciudad autónoma, con muchos comercios cerrados y con los servicios sanitarios y de emergencia ya presionados tras más de un año de pandemia.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pudo comprobar por la tarde en persona la situación a su llegada a la ciudad autónoma, donde un grupo de ciudadanos increparon a la comitiva de vehículos a su salida del helipuerto, algunos de los cuales llegaron incluso a alcanzar uno de los coches. También hubo abucheos y gritos de apoyo a su llegada a Melilla.

Durante poco más de una hora Sánchez permaneció en Ceuta, antes de viajar a Melilla, para conocer sobre el terreno la evolución de la crisis migratoria y, tras reunirse con el presidente ceutí, Juan José Vivas, se dirigió a la frontera del Tarajal, donde comprobó el refuerzo en la seguridad de la frontera.

Unos 4.000 ya han sido devueltos, según los últimos datos facilitados por el Ministerio del Interior, que informó de aumentar la presencia de agentes y medios de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en Ceuta. Además de un refuerzo de 200 efectivos, se van a desplegar otros 50 agentes de la Guardia Civil, y 150 agentes de las Unidades de Intervención Policial (UIP) están en alerta por si fuese necesario su traslado y despliegue en la ciudad autónoma.

A las fuerzas de seguridad hay que sumar el Ejército que se ha desplegado para proteger la frontera con Marruecos y, aunque el Ministerio de Defensa no da cifras, fuentes militares apuntan que hay destinados alrededor de 3.000 efectivos.

Crisis diplomática

Rabat, por otra parte, llamó a consultas de su embajadora en Madrid, Karima Benyaich, según confirmaron fuentes diplomáticas marroquíes sin dar más detalles. La oleada migratoria se produce en medio del descontento y enfado marroquí por la entrada y hospitalización en España del secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali, ingresado por covid desde hace semanas en un hospital de Logroño.

Por otra parte, el Rey Felipe VI, telefoneó este martes al presidente del Gobierno de Ceuta, Juan Vivas (PP), para “interesarse” por la situación. El Ejecutivo regional explicó en un comunicado que el jefe del Estado trasladó a Vivas su “solidaridad” y “un mensaje de ánimo a la ciudadanía”.