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INDULTOS

Los presos del procés quedan en libertad tras el indulto del Gobierno

Se les conmuta el tiempo que les quedaba por cumplir de las penas pero se mantiene la inhabilitación para cargo público

Jordi Cuixart, a la salida de la cárcel de Lledoners, un día después de ser indultado por el Gobierno de España
Jordi Cuixart, a la salida de la cárcel de Lledoners, un día después de ser indultado por el Gobierno de España
E.P.

Los presos del procés han abandonado la cárcel pasadas las 12.00 horas de este miércoles, después de que el Tribunal Supremo haya ordenado su excarcelación en aplicación del indulto parcial del Gobierno, que conmuta el tiempo que les quedaba por cumplir de las penas de entre nueve y trece años de prisión.

Una vez el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado el indulto y el Supremo ha ordenado su puesta en libertad, a las 12.06 horas han salido del centro penitenciario barcelonés de Lledoners, con una pancarta con el lema "Freedom for Catalonia" (Libertad para Cataluña) y una bandera independentista, el exvicepresidente Oriol Junqueras, los exconsellers Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn y Josep Rull y y los exlíderes de la ANC Jordi Sànchez y de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.

La primera de los presos del procés en salir de prisión, a las 12.00 horas en punto, ha sido la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, que cumplía condena en la cárcel de mujeres de Wad Ras, en Barcelona, mientras que la exconsellera Dolors Bassa ha abandonado el centro penitenciario de Puig de les Basses, en Figueres (Girona), a las 12.15 horas.

A su salida de Lledoners, los presos han sido recibidos por familiares, por el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y por varios consellers del Govern y dirigentes de los partidos y entidades independentistas, además de por decenas de personas, que les han aclamado.

A Carme Forcadell la han recibido en Wad Ras sus sucesores en la presidencia del Parlament, Roger Torrent y Laura Borràs, así como los consellers de Interior, Joan Ignasi Elena, y de Economía, Jaume Giró, entre otros, mientras que a Dolors Bassa la ha acompañado la consellera de Justicia, Lourdes Ciuró, entre otros.

El Gobierno aprobó este martes un indulto parcial y reversible para los nueve presos del procés, a los que ha conmutado las penas cárcel que en octubre de 2019 les impuso el Supremo por sedición y malversación, aunque les mantiene la inhabilitación para cargo público y condiciona su excarcelación a que no cometan otros delitos graves en un período de entre tres a seis años.

Tras la publicación del real decreto del indulto en el BOE, la Sala de lo Penal del Supremo ha dirigido un escrito a cada una de las correspondientes prisiones catalanas para que pongan en libertad a los condenados.

En concreto, el tribunal -al que corresponde ejecutar la medida de gracia- ha dictado una providencia y un mandamiento de libertad para cada uno de los nueve presos indultados en los que ordena a los directores de los centros penitenciarios de Lledoners, en Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona), Puig de les Basses, en Figueres (Girona), y Wad-Ras de Barcelona la "inmediata libertad" de los presos.

Las cárceles catalanas han recibido los mandamientos del Supremo a las 10.30 horas, tras lo cual los presos, una vez han cumplido los trámites correspondientes, para recoger sus pertenencias y firmar su salida de la prisión, han abandonado definitivamente el centro penitenciario, tras más de tres años encarcelados.

Según han informado a Efe fuentes penitenciarias, varios internos del Módulo 2 de Lledoners, donde cumplían condena Junqueras, Romeva, Turull, Forn, Rull y los Jordis, se han abrazado con los líderes independentistas y les han felicitado por su excarcelación.

El indulto del Gobierno conmuta las penas pendientes de prisión de los condenados, aunque se mantendrán las de inhabilitación, por lo que no podrán ejercer cargos públicos mientras dure la pena.

Los indultos estarán además condicionados a que no cometan un delito grave en un período de entre tres a seis años o, de lo contrario, esta medida de gracia quedaría sin efecto.