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Javier Rey: “Me hubiera gustado que Almudena viera la serie”

Acaba el rodaje de ‘Los pacientes del doctor García’, adaptación de Grandes

Rodaje de la serie ‘Los pacientes del doctor García’.
Rodaje de la serie ‘Los pacientes del doctor García’.
EFE

Complicado, largo y lleno de nostalgia por la muerte de Almudena Grandes. Así ha sido el rodaje de la serie Los pacientes del doctor García, la adaptación de la obra homónima de la escritora, un proyecto que conoció de cerca y con el que estaba muy ilusionada, cuyo rodaje acaba de concluir en Madrid.

Un señorial e inmenso piso de la calle Sagasta es el lugar donde se ruedan las últimas escenas de la serie, el primer proyecto de televisión inspirado en una obra de la escritora madrileña, fallecida en noviembre a los 61 años.

“Me hubiera gustado que lo viese, haberla tenido por aquí habría sido mejor para todos nosotros. Pero la vida tiene estas cosas y una semana después de morir estábamos rodando en el cementerio donde está enterrada”, cuenta el actor Javier Rey, quien lleva seis meses metido en la piel del protagonista.

Ganadora del Premio Nacional de Narrativa, Los pacientes del doctor García (Tusquets Editores) es la cuarta de las novelas que forman Episodios de una guerra interminable, el proyecto de la escritora con el que quiso narrar momentos significativos de la resistencia antifranquista.

La serie homónima es una coproducción de RTVE, Diagonal (Banijay Iberia) y DeAPlaneta, con la participación de Netflix, y se estrenará en unos meses en La 1 de TVE y en la plataforma, casi al mismo tiempo.

Aunque no tuvo tiempo de ver cómo lucirían sus personajes en la pequeña pantalla, Grandes (quien ya tiene varias novelas adaptadas al cine como Las edades de Lulú o Malena es un nombre de tango) sí llegó a conocer quiénes serían los protagonistas y leyó varios de los guiones de los episodios, según el director de la serie, Joan Noguera (Amar en tiempos revueltos, Isabel).

“Le pasamos los cuatro primeros guiones y antes de empezar nos dijeron que los había leído y que estaba muy contenta e ilusionada con la adaptación”, dice.

Tras el fallecimiento de la escritora el vínculo de su familia con el proyecto ha continuado y “su esposo (Luis García Montero) y su hijo estuvieron visitando algunas localizaciones”, añade.

“Fue una cosa muy emotiva. Él vio imágenes ya grabadas y nos contaba que realmente él veía y sentía la novela en esas imágenes. Yo espero que si estuviera ella estaría contenta e ilusionada y vería reflejada su novela”, agrega Noguera.

El libro y la ficción cuentan la historia del doctor Guillermo García Medina (Javier Rey), quien tras la victoria de Franco sigue viviendo en Madrid bajo una identidad falsa gracias a la documentación que le facilitó su mejor amigo, Manuel Arroyo Benítez (interpretado por Tamar Novas), un diplomático republicano al que salvó la vida en 1937.

El doctor García cree que nunca volverá a verlo, pero en septiembre de 1946, Manuel vuelve del exilio con una misión secreta y peligrosa, la de infiltrarse en una organización clandestina, la red de evasión de criminales de guerra y prófugos del Tercer Reich que dirige desde el barrio de Argüelles una alemana y española, nazi y falangista, llamada Clara Stauffer (Eva Llorach).

Verónica Echegui completa el reparto principal como Amparo Priego en una serie cuyo elenco lo forman actores como Jon Olivares, Roberto Álamo, Claudia Traisac, Nancho Novo o Luis Bermejo, entre otros.

Para Noguera, el fatídico hecho de que la serie haya llegado tras la muerte de Grandes no ha hecho sino aumentar la presión y el reto. “Esto hace que la responsabilidad que tenemos, si ya era grande, sea mayor porque estamos intentando en todo momento hacer una cosa muy cercana a lo que ella escribía, a lo que la novela plasma”, cuenta. Y ha sido un reto magnánimo: 150 localizaciones, 2.500 figurantes, muchos exteriores naturales y una trama que transcurre durante 42 años y países como Inglaterra o Argentina, que han sido recreados entre Segovia, Guadalajara y Madrid.

“Todo está multiplicado por tres en comparación con lo que sería un proyecto aquí en España”, asegura Javier Rey, quien ha tenido su propio desafío, el de dar vida -ayudado en ocasiones por prótesis faciales- a un hombre entre los 22 y los 64 años.

“Me asustaba lo de envejecer con el personaje. Eso es una idea que a priori sobre el papel es un regalo, pero es un caramelo envenenado porque si no está bien hecho te puedes cargar absolutamente todo”, explica el actor.

Almudena Grandes “desarrolla un personaje con una profundidad bestial y es un sueño tener la oportunidad de acompañarlo durante todas sus fases de vida, envejecerlo, ver cómo evolucionan las cosas que le perturban, ver los subidones y bajones de su vida, que son constantes y cíclicos”, concluye Javier Rey.