Actualidad

JUSTICIA

Suspenden a Laura Borràs como diputada y presidenta del Parlament catalán

La imputada ha cargado contra ERC, CUP y PSC por ser "cómplices" de la "guerra sucia"

Laura Borràs ha comparecido tras su suspensión como diputada y presidenta de la cámara catalana.
Laura Borràs ha comparecido tras su suspensión como diputada y presidenta de la cámara catalana.
EFE

La Mesa del Parlament ha aprobado este jueves -con los cinco votos de PSC, ERC y CUP, frente a uno en contra de JxCat- suspender a Laura Borràs como diputada y presidenta de la cámara catalana, segunda autoridad política de Cataluña, tras la apertura de juicio oral por su causa judicial por corrupción.

La Mesa ha iniciado su reunión sobre las 12:15 horas, con un único punto en el orden del día: la suspensión de Borràs en aplicación del artículo 25.4 del reglamento del Parlament, tras enviarla a juicio el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, por los delitos de prevaricación y falsedad documental, al fraccionar presuntamente contratos de la Institució de les Lletres Catalanes.

El artículo 25.4 -introducido en la reforma del reglamento que aprobaron Junts pel Sí y la CUP en 2017, en vísperas del referéndum unilateral del 1 de octubre- establece que la Mesa "debe acordar la suspensión de los derechos y deberes parlamentarios de manera inmediata" si a un diputado le abren juicio oral por corrupción.

Borràs no ha participado en la deliberación ni en la votación sobre su suspensión, por evidente conflicto de intereses, por lo que se ha ausentado de la sala poco antes de las 13.00 horas, cuando el resto de miembros de la Mesa -Alba Vergés y Ruben Wagensberg (ERC), Assumpta Escarp y Ferran Pedret (PSC-Units), Aurora Madaula (JxCat) y Carles Riera (CUP)- han empezado a debatir y votar el 25.4. 

Duras críticas

Posteriormente, Laura Borràs ha protagonizado su declaración más dura contra ERC, la CUP y el PSC, a quienes ha acusado de actuar como "jueces hipócritas" al apartarla y de ser "cómplices" de la "guerra sucia" contra el independentismo.

"Mi suspensión solo beneficia a quienes han apostado por la guerra sucia, pero también hace cómplices a quienes la han ejecutado de manera totalmente gratuita e innecesaria", ha denunciado Borràs en una declaración de casi media hora, en la que ha dicho ser víctima de un "atropello democrático" por parte de quienes no pueden "disimular su deseo" de hacerla "desaparecer" como adversaria política.

Borràs ha insistido en que su caso tiene un "indudable componente de persecución política", por lo que su suspensión "allana el camino para que los responsables" de esta persecución logren su "objetivo".

Asimismo, ha acusado a ERC y CUP de no tener "otra expectativa que la autonomía ni otra motivación política que sus respectivos partidos" y les ha advertido de que, pese a estar suspendida, no dimitirá del cargo para facilitar su relevo en la presidencia del Parlament: "No renuncio, no me doblego, no me han vencido".

"No pienso permitir que los que están dando pasos atrás nos digan a quienes damos pasos adelante que demos un paso al lado", ha dicho Borràs, que no quiere "rendirse" porque su dimisión solo serviría para "reforzar una apariencia de normalidad".

Al forzar esta "situación de interinidad" en un Parlament con su presidenta apartada hasta que haya sentencia, pretende evitar dar cualquier "facilidad a los represores y a sus cómplices", ha continuado.

Las funciones presidenciales recaen ahora teóricamente sobre la vicepresidenta primera del Parlament, Alba Vergés, a quien Borràs ha retado a seguir "contabilizando" el voto del diputado de JxCat Lluís Puig -huido a Bélgica- pese a las "prohibiciones de los tribunales".

La "injusta decisión" de su suspensión, según Borràs, "hace daño al conjunto del independentismo", porque es "una señal de que la represión hace su trabajo y tiene sus efectos".

Borràs -que ha exhibido una postal de la Institució de les Lletres Catalanes con el mensaje: "Las cosas importantes son las que no lo parecen"- ha dicho que siente una "frustración política enorme" al ver que JxCat, ERC y CUP "tienen agendas políticas que están muy lejos de converger en una estrategia" unitaria, "ni en el Govern ni en el Parlament".

Para Borràs, este artículo -introducido precisamente por Junts pel Sí y la CUP en 2017 en una reforma del reglamento para amparar el referéndum unilateral del 1 de octubre- "debería estar retirado del reglamento", porque "vulnera derechos fundamentales", a la presunción de inocencia y al sufragio activo y pasivo.

Este artículo "infame" representa, a su juicio, una "anomalía democrática": "Me han aplicado un artículo que sabían que no me podían aplicar, para apartarme políticamente", ha denunciado Borràs, que ha acusado a ERC, CUP y PSC de actuar con "premeditación", antes de añadir: "Si hasta ahora aplicaban el derecho penal del enemigo, ahora aplican el reglamento del enemigo".