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ELECCIONES

El debate a 8 sella diferencias de la política fiscal al modelo territorial en Aragón

La despoblación ha sido otro de los grandes temas abordados en este foro organizado por Heraldo

El debate a 8 sella diferencias de la política fiscal al modelo territorial en Aragón
El debate a 8 sella diferencias de la política fiscal al modelo territorial en Aragón
EFE

ZARAGOZA.- Ocho candidatos delante de un atril y alrededor de cuatrocientas personas en el público, la mayoría de ellas tomando partido. Así ha sido el primer debate electoral de esta campaña, en el que han participado los aspirantes a la presidencia de Aragón y en el que han quedado patentes su diferencias en política fiscal o modelo territorial, entre otras muchas.

Heraldo de Aragón ha organizado en el Auditorio de Zaragoza este primer encuentro, moderado por el director del diario, Mikel Iturbe, que ha contado con la participación de Luis María Beamonte (PP), Javier Lambán (PSOE), Maru Díaz (Podemos), Arturo Aliaga (PAR), Daniel Pérez (Ciudadanos), José Luis Soro (CHA), Álvaro Sanz (IU) y Santiago Morón (Vox).

La política fiscal ha demostrado la división en dos bloques. Para Beamonte Aragón es un "auténtico infierno fiscal", pero Lambán ha desmentido esta "cantinela eterna", en tanto en cuanto la presión fiscal en la comunidad, según ha dicho, está por debajo de la media y por ejemplo en Sucesiones, reformado la pasada legislatura gracias a un pacto entre PSOE y el centro derecha, "se paga menos que con Luisa Fernanda Rudi".

Sanz ha exigido una reforma fiscal que vaya en la dirección contraria a la rebaja del impuesto de Sucesiones y ha dicho que se necesita un gobierno que tenga la capacidad para meter la mano en el bolsillo de quienes más tienen, mientras que Díaz ha estimado que la clave no es si los impuestos se suben o se bajan, sino "quién los paga".

En el lado contrario, Pérez ha abogado por "matar al impuesto de la muerte" y por bajar de forma gradual otros impuestos, lo que facilitará la llegada de talento e inversiones a Aragón y Morón por tener los impuestos "indispensables, justos y mínimos" para reactivar la economía

Beamonte también ha asegurado que el principal problema de Aragón es su propio Gobierno y que es necesario un cambio, mientras que Lambán le ha replicado que hay un partido, el PP, que crea problemas, -ha aludido a "durísimos recortes, crecimiento del paro y descontrol del déficit- y otro, el PSOE, que "los soluciona y hace que algo funcione".

Para Díaz, el problema es la incapacidad de repensarse a largo plazo, porque aunque se han revertido los recortes en esta legislatura, Aragón no ha sido capaz de "proyectarse" para solucionar la precariedad laboral o las brechas de género, generacional y rural, y para ello no hay que "repetir recetas" sino "apostar por otras nuevas".

También para Sanz ha faltado "ambición" en estos cuatro años, mientras que Aliaga se ha erigido en el principal defensor del pacto y el acuerdo para lograr un Gobierno "sólido, estable y potente" que se tome la resolución de los problemas "en serio", con la intención de hacer "mucho más fuerte" la posición de Aragón para negociar con el Estado.

Beamonte también ha dicho que Aragón es tierra de pactos y que él "quiere alcanzarlos", porque "hay otra manera absolutamente distinta de hacer las cosas", sin agravios con respecto a otras comunidades y con "profundo respecto" a la Constitución y al Estatuto.

Soro ha advertido de que con un gobierno de derechas "evidentemente misógino" se retrocederán décadas, y ha mostrado su intención de "sumar" para un ejecutivo "de progreso", aunque ha mostrado sus dudas acerca de lo que quiere hacer el PSOE y si está dispuesto o no a pactar con Ciudadanos.

Según Morón, "la raíz" de los problemas de Aragón está en el Estado de las Autonomías, un sistema "fallido e insoportable". A su juicio, la negociación de los presupuestos generales es un "bochornoso espectáculo en el que algunas comunidades se llevan el gato al agua y otras salen desfavorecidas año tras año".

Y ha añadido que en Aragón, la ley de actualización de los derechos históricos, junto a la "equivocada" política lingüística y la "fragmentación del territorio" en comarcas, ha creado una "mezcla explosiva" que ha hecho que la comunidad acabe "cediendo ante un pancatalanismo expansivo que hay que combatir".

Para Lambán, a Aragón "le ha sentado magníficamente bien la autonomía" y al respecto de suprimirla, ha reconocido que si ya le da miedo un Gobierno del PP, que se la cree "poco", que este gobierno dependa de Vox le produce "escalofríos".

Aliaga le ha replicado que el Estatuto de Autonomía es "sagrado" y Soro ha mostrado su estupor por que en 2019 haya que seguir defendiendo las autonomías: "los problemas vienen de un Estado centralista, heredero del franquismo", ha zanjado.

Respecto a la despoblación, Pérez ha propuesto un "gran pacto autonómico" pero no de partidos, sino "de la gente".

Para Soro, el problema "no se ataja suprimiendo ayuntamientos ni comarcas ni gestionando la Educación desde Madrid", en claro mensaje a Ciudadanos, algo en lo que ha coincidido con Díaz, quien ha afeado a la formación naranja que pretendan eliminar los ayuntamientos de menos de 5000 habitantes y las comarcas, en un "desconocimiento absoluto" de la realidad del territorio.

Pérez les ha contestado que lo que pretende Ciudadanos es cargarse "enchufismos, chollos y amiguetes colocados", porque lo que se necesita es "más gasto social y menos gasto político", y si las diputaciones y las comarcas, que están para dar servicio, no lo dan, "hay que cerrarlas". Vox también propone frenar "el despilfarro" con la supresión de las comarcas.

"No al trasvase. Que no haya ninguna duda", ha recalcado Beamonte después de que Morón sacara a colación en el debate el Plan Hidrológico Nacional. El líder de Vox ha dicho que su partido no pretende trasvasar agua, sino "regular su uso racional" y después, "aprovechar los excedentes que no se utilicen para negociar bajo un principio de solidaridad.

Maru Díaz ha contestado que esta propuesta demuestra que un gobierno de derechas, "con la presión de Pablo Casado y de Vox", obligará a los aragoneses a "volver a salir a la calle para defender un agua pública".

La propia Díaz ha introducido el feminismo en el debate en el que ella era la única mujer. Ha considerado "sintomático" que se olvide el problema de la violencia machista, de la brecha salarial y de la conciliación, que es un problema "real" y que necesita soluciones. "Necesitamos un Aragón feminista, en el que todas podamos vivir sin miedo", ha enfatizado.

Por su parte, Sanz ha contrapuesto al riesgo del machismo, la xenofobia y el racismo, el laicimo, la memoria, la solidaridad y el feminismo.

"El futuro de Aragón no es feminista ni machista, sino de igualdad entre hombres y mujeres", ha contestado Pérez.