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ALTO ARAGÓN - TURISMO

El acceso a Ordesa desde Torla se ha cortado 5 días este verano

El periodo de máxima afluencia se ha producido en los últimos quince días

El acceso a Ordesa desde Torla se ha cortado 5 días este verano
El acceso a Ordesa desde Torla se ha cortado 5 días este verano
S.E.

HUESCA.- La afluencia de visitas al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido durante este verano es superior al año pasado, dado que en el acceso por Torla se ha colgado el cartel completo al haberse alcanzado el aforo máximo establecido de 1.800 personas a primera hora de la mañana, con el servicio de autobuses durante este mes de agosto.

A falta de confirmarse estas sensaciones en las cifras globales de cara al balance total de visitas previsto para finales de año, el técnico de uso público del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Luis Marquina, explica en declaraciones a este periódico, que cuando se llega a las 1.800 personas de forma simultánea en el valle, "ya no se expide ningún tiqué de autobús y este hecho se ha producido cinco veces en el mes de agosto y el año pasado solo una vez".

En estas jornadas, los momentos de máxima ocupación se han rebajado en torno a las 14 o 14:30 horas, con el regreso de algunos visitantes, detalla.

En términos generales, Marquina explica que las visitas a este espacio protegido "han tenido una primera quincena de agosto más floja que otros años y la segunda ha sido más fuerte".

Una situación, apunta, que es extrapolable a todos los sectores de acceso al Parque Nacional en Torla, Escuaín, Revilla y Pineta.

Este año se da la circunstancia de que las visitas "han incrementado en la segunda quincena del mes de agosto" respecto a otros años. Un hecho que atribuye "al buen tiempo" que se ha registrado en el Parque de Ordesa.

En el mes de julio, indicó, el nivel de afluencia "se sitúa un poco por encima" de otros años mientras que el de junio estuvo por debajo, salvo los últimos fines de semana en los que se cerró el acceso al parque al haber alcanzado la máxima ocupación por afluencia de vehículos.

Precisamente, el servicio de autobuses para acceder al Parque Nacional de Ordesa está operativo entre el 1 de julio y el 15 de septiembre y lo gestiona el propio Ayuntamiento de Torla.

El técnico de este espacio protegido también subraya que se ha constatado "mucha más afluencia en los ocho puntos de información y en los centros de visitantes en todos los accesos al Parque". Destaca que en todos ellos, "se busca que el visitante recabe información meteorológica o de consejos antes de entrar, de forma precisa y actualizada".

Unos niveles de afluencia que también fueron confirmados por el coordinador medioambiental del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Ramón Castillo, quien estima que a falta de las cifras oficiales, las visitas al parque han subido al menos un 10 por ciento respecto al verano del 2018. "Este año ha habido más gente que se ha tenido que dar la vuelta", subraya.

Respecto a los cinco días que ha estado cerrado el parque de Ordesa por alcanzarse la máxima ocupación, indica que en uno de ellos, tras bajar un autobús que devolvía a los turistas al centro de visitantes de Torla, había otras 70 esperando. Este último fin de semana, la afluencia ha sido menor por el retorno vacacional.

CUMPLIMIENTO DE LA NORMATIVA

En cuanto al comportamiento de los visitantes, Marquina recalca la importancia de que los visitantes cumplan las normas de llevar los perros atados en el interior y llevarse las colillas o los restos papel higiénico en una bolsa de plástico.

Por su parte, el coordinador medioambiental del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Ramón Castillo, también se refiere a que los APN junto a los empleados de Sarga se encargan de vigilar los incumplimientos de la normativa.

"ESTAMOS MUY POCO PERSONAL Y DESBORDADOS"

Uno de los tres agentes de protección de la naturaleza (APN) que cubren el sector desde Torla junto a un guarda forestal, Javier Gómez, lamenta la "excesiva presión" en el Parque Nacional de Ordesa que se produce por la llegada de personas que acceden hasta esta zona por otros puntos.

En su opinión, los actos del Centenario del espacio protegido "han tenido un efecto llamada" hasta el punto de que se "ha tenido que cerrar el parque en varias ocasiones por exceso de visitantes".

Para Gómez, "estamos muy poco personal y desbordados para el número de visitas". Un aluvión de turistas, explica, que se ha visto incrementado por la llegada de visitantes desde otros accesos hasta el sector de Torla.

A su juicio, el incremento de visitas este verano supone "una presión excesiva" para este espacio protegido y en el que "se están imponiendo entre cinco o seis denuncias al día" por el incumplimiento de la normativa establecida.

"Por la brecha de Roldán pueden venir entre 200 y 300 personas por día", a los que hay que sumar los procedentes de Nerín. Como dato, el agente de protección de la naturaleza expone que en el refugio de Góriz "se han llegado a servir cenas para 250 personas en una jornada".