La Automoción pide ayuda ante el reto tecnológico y Aliaga compromete su apoyo

ZARAGOZA.- El Clúster de Automoción de Aragón ha reclamado apoyo al Gobierno autonómico ante los desafíos tecnológicos del sector y amenazas que inciden en la competitividad de las empresas, como los costes de fabricación y la formación de los trabajadores, y el vicepresidente del ejecutivo, Arturo Aliaga, ha garantizado colaboración y el mantenimiento de las líneas de ayudas.

Aliaga ha mantenido este miércoles su primera reunión tras tomar posesión del cargo con la junta directiva del clúster y en una comparecencia conjunta con el presidente del organismo, Benito Tesier, quien ha insistido en que el automóvil vive una importante transformación que obliga a todos a hacer los deberes "serios y comprometidos" ante la necesidad de reinventarse.

En este contexto, ha destacado la presentación en Fráncfort del primer vehículo eléctrico fabricado en la comunidad, el Opel Corsa ensamblado en Figueruelas (Zaragoza), lo que demuestra que Aragón "está preparada para los retos tecnológicos del futuro".

Sin embargo, ha apuntado que además de esa buena noticia también hay amenazas y que es necesario trabajar, como hace el clúster, para que las empresas del sector no pierdan competitividad.

Los costes de producción, en relación con la actualización de las empresas hacia la Industria 4.0 con apoyos a la inversión de las compañías, o la adaptación de los trabajadores a la tecnología del futuro exigen un trabajo conjunto con el Gobierno de Aragón en planes "ambiciosos" de formación, ha destacado Tesier, quien también ha reclamado una apuesta por captar empresas desarrolladoras de tecnologías para que se instalen en el territorio y hacer que el "ecosistema" de automoción sea competitivo.

Tersier ha insistido en que la automoción, que supone 25.000 empleos en Aragón, no se puede quedar atrás en la movilidad del futuro y ha de estar a la "altura" de los límites que ha marcado Europa respecto a las emisiones, y eso no puede afrontarse si no se cambian las tecnologías de los vehículos de combustión, teniendo certidumbre en el mercado, sumadas a las de hibridación y electrificación.

"Que Aragón esté ya fabricando un vehículo eléctrico en 2019 es una demostración clara de que estamos a la altura de las circunstancias", ha remarcado, al tiempo que ha asegurado que aunque ha bajado en España la matriculación de vehículos, un 9 %, se exporta más del 75 % del volumen de fabricación, de unos tres millones.

En el caso de las empresas del clúster, con 85 socios y 14.000 empleados, prevén cumplir sus expectativas, a pesar de las incertidumbres externas como el "brexit", y trabajan en aumentar la facturación del año pasado, de unos 2.800 millones.

"Seguimos trabajando con optimismo", ha asegurado, al tiempo que ha recordado que están a la espera de que se adjudiquen las ayudas a proyectos asociados a la fabricación del coche eléctrico por inversiones en tres años de alrededor de 25 millones, este mes o en octubre.

Aliaga, por su parte, ha hecho hincapié en que la automoción es esencial para que Aragón mantenga su PIB industrial y ha apelado a la anticipación del sector al futuro y planificar no para 2020, sino para 2030, en inversiones en procesos más avanzados para ganar competitividad y también productos.

En ese sentido, ha apuntado que ya está en marcha el Corsa eléctrico pero su siguiente versión tendrá aún más novedades, con más componentes electrónicos y de sensorización, con lo que el esfuerzo que han de hacer las empresas "no es para mañana", sino para posicionarse estratégicamente en el mercado global.

"Para eso tenemos que estar perfectamente comunicados", también con el nuevo gobierno central cuando se formalice, ha señalado Aliaga, quien ha garantizado el compromiso del Gobierno de Aragón con el sector, y ha destacado en ese aspecto la línea de ayudas de apoyo al vehículo eléctrico, una línea que continuará.