Las retenciones influyen de forma negativa en negocios junto a la carretera N-330

SABIÑÁNIGO.- Desde el establecimiento comercial Chocolates de la Abuela que se encuentra a pie de la carretera N-330 a su paso por Hostal de Ipiés, en el municipio de Sabiñánigo, su propietaria Carina Suárez comenta que las retenciones de estos días influyen negativamente en su comercio.

"Cuando los coches van en caravana no piensan en parar para hacer compras para no salirse de la fila y demorar su trayecto", lamenta la propietaria preguntada por las retenciones de vehículos que se han registrado de forma más importante en el inicio y la recta final del pasado puente de la Constitución y de la Inmaculada.

"Además en el caso puntual nuestro -comenta Carina Suárez- los efectivos de la Guardia Civil se colocan en la explanada donde se encuentra este comercio con el silbato y el chaleco amarillo instando a los conductores a que continúen y no ralenticen la conducción, lo cual no alienta a que nadie pare, para nosotros esto es fatal".

La propietaria de Chocolates de la Abuela argumenta que, en su caso, ya sabe que esto es lo que toca cuando hay puentes o festivos señalados. "O es esto o es la autovía cuando se haga el tramo de Hostal de Ipiés, y las dos cosas son negativas para nosotros como comercio abierto", explica.

"Cuando suben los viernes hay caravana lenta y como tienen ganas de llegar a destino es difícil que la gente pare en nuestro establecimiento", indica respecto a estas situaciones de tráfico denso.

En su opinión, "los clientes sí entran pero la gente que no te conoce de nada lo dejan para la próxima vez".

Asimismo, incide en que si la solución para que no haya retenciones en este tramo "es la autovía, para nosotros también es negativo porque tendrán que salirse de ella para venir a nuestro negocio, pero lo llevaremos como podamos", añade la propietaria de este establecimiento de Hostal de Ipiés a pie de la carretera N-330.