Aragón

BORRASCA EN EL ALTO ARAGÓN

Cauces espectaculares, desprendimientos y cortes de carreteras por las copiosas lluvias

Las cabeceras de los ríos del Pirineo experimentaron crecidas reseñables aunque no hubo incidencias destacables

Cauces espectaculares, desprendimientos y cortes de carreteras por las copiosas lluvias
Cauces espectaculares, desprendimientos y cortes de carreteras por las copiosas lluvias
S.E.

HUESCA.- Las copiosas lluvias que trajo en la noche y madrugada de este viernes la borrasca Elsa, que llegó acompañada de fuertes vientos, dispararon los caudales de los ríos pirenaicos, sobre todo en sus cabeceras, con espectaculares crecidas que, no obstante se mantuvieron en lo que se consideran aumentos ordinarios. Las abundantes lluvias y el viento trajeron algunos problemas como desprendimientos de rocas y tierra, que en algunos casos cortaron carreteras. También las adversas condiciones meteorológicas obligaron al cierre de las estaciones de esquí de Formigal y Candanchú.

Tras el espectacular incremento de caudales de las cabeceras de las cuencas del Pirineo central, conforme las crecidas llegaban a los tramos medios fueron disminuyendo su volumen a ser laminadas por los embalses, excepto en el tramo medio del Gállego, apuntaron fuentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro.

La lluvia dejó paso a la nieve, ya que a primera hora de la noche del vienes se precisaban cadenas para transitar por algunos tramos carreteros del Pirineo debido a las nevadas que habían comenzado a caer.

En la Jacetania, las intensas lluvias de las últimas horas generaron un desprendimiento de rocas, tierra y barro que invadió por completo un pequeño tramo de la carretera que une Barós y Ulle, dos pedanías de Jaca. La Diputación Provincial de Huesca, responsable de la vía, encargó a primera hora de la mañana la adecuación de la vía, que se pudo reabrir al tráfico sobre la una y media del mediodía. En las labores de adecuación, intervino una máquina que retiró las piedras y la tierra, tras lo cual el Servicio de Emergencias del Ayuntamiento de Jaca limpió con agua el tramo afectado, por el que se pudo circular en condiciones normales durante el resto del día.

El corte de la carretera afectó a los vecinos que viven en estos dos pequeños núcleos rurales, que están incluidos en una ruta escolar.

Esta fue la principal incidencia en la Jacetania, donde la estación de Candanchú cerró por las inclemencias meteorológicas y hubo afecciones menores en la zona de la Garcipollera, sin llegar a producirse desprendimientos reseñables.

En el Alto Gállego también hubo incidencias por la borrasca, que dejó precipitaciones acumuladas de más de 100 litros en el conjunto del territorio.

Por la tarde se registró un desprendimiento de rocas en la carretera N-260, en el municipio de Yebra, justo pasado el puente de San Julián en dirección a Fiscal. Tras el derrumbe, una furgoneta que circulaba por la carretera chocó contra las rocas caídas. Su conductor salió ileso, pero el vehículo sufrió desperfectos.

Anteriormente, por la mañana había permanecido cortado al tráfico uno de los dos carriles de la carretera A-136 (Biescas-El Portalet) a la altura de la ermita de Santa Elena, en el municipio de Biescas, debido a un desprendimiento de rocas y tierras que cayó sobre la calzada. Durante el tiempo que permaneció cortada la vía mientras duraban la tareas de limpiezas, se dio pasado alternativo por el otro carril. La situación se normalizó a primera hora de la tarde.

En el término municipal de Sabiñánigo, por la mañana un desprendimiento de rocas en la carretera de acceso a la localidad de Acumuer obligó a cortar la vía en los dos sentidos de la circulación. El Ayuntamiento de la capital serrablesa envió una pala que junto al equipo de obras de la Diputación Provincial de Huesca que estaba en la zona solventaron el problema lo antes posible.

En el pueblo de Ibort se desbordó el río, circunstancia que se repite cuando baja el caudal crecido, anegando parte del acceso a este núcleo, que quedó intransitable. Los vecinos tuvieron que buscar vías alternativas por caminos próximos para llevar a los niños a los colegios de Sabiñánigo al no poder llegar hasta el pueblo el transporte escolar.

La alcaldesa de Sabiñánigo, Berta Fernández, explicó que también se detectó un problema de turbidez de agua en la presa de Isín, lo que obligó a cortar el suministro a los pueblos de Larrés y Borrés. Indicó que "el Consistorio va a enviar informes de estas incidencias tanto al Gobierno de Aragón como a las instituciones competentes para que sean conocedoras de los problemas que hemos tenido y actúen en consecuencia".

También los ríos que discurren por Sobrarbe bajaron este viernes con mayor bravura por las fuertes lluvias, con fue el caso del Ara o el Cinca. Bielsa, con 87 litros por metro cuadrado, era a las 20 horas de ayer la localidad de todo Aragón en la que más había llovido al haberse acumulado 87 litros por metro cuadrado, seguida de Panticosa, con 85 litros; Biescas, con 83; Seira con 61; y Canfranc con 59.

En Ribagorza, las aguas del Ésera arrastraban numerosos materiales a su paso por Graus, mientras que otros ríos como el Baliera, se desbordaron debido a la suciedad del cauce, según alertó la alcaldesa de Montanuy, Esther Cereza.

Las lluvias dejaron más de 75 litros por metro cuadrado en Eriste, por ejemplo; 55,4 en Laspaúles y casi 20 litros por metro cuadrado en 24 horas en Capella, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) relativos a la jornada del vienes. Las precipitaciones continuaban a última hora de la tarde y eran de nieve en la parte alta de la comarca, como en Aramón Cerler, donde se esperaba que las nevadas continuaran este sábado.

Las mismas fuentes, situaban el caudal del Ésera a su paso por Campo el vienes en 76,33 metros cúbicos por segundo, mientras que el del Isábena en Capella era de 53,73. Cabe destacar el desbordamiento del río Baliera, afluente del Noguera Ribagorzana, en Noales, municipio de Montanuy. El río desbordó su cauce en un punto situado unos 500 metros al sur del núcleo de Noales, sin ofrecer riesgo para la población, según precisó la alcaldesa, quien aprovechó para pedir la limpieza de este cauce, cuya suciedad ya se evidenció en el incendio de Castanesa. "En aquella ocasión, el fuego cruzó el río por la maleza que acumula, no sirvió de cortafuegos, y ahora se ha desbordado por el mismo motivo", dijo.

Cereza anunció que el Ayuntamiento está realizando un estudio que se hará llegar a la CHE para detectar los cauces que requieren limpieza, así como los muros de los ríos que deberían ser reforzados, avanzó.