Marta Gastón: "Mientras los rebrotes sean selectivos, la afección a la economía será mínima"

HUESCA.- La posibilidad de un rebrote de la pandemia generalizado que obligue a un nuevo confinamiento es el mayor de los riesgos para la recuperación económica, subraya la consejera de Economía, Marta Gastón. Los rebrotes "selectivos y controlados" no supondrán un agravamiento de la situación. Así las cosas, apela a la responsabilidad individual para tratar de evitar contagios masivos. La incertidumbre, que lastra la demanda, es ahora mismo el mayor problema al que se enfrenta la economía para ir acelerando la recuperación que, no obstante, será progresiva y no rápida, advierte la consejera en las respuestas a un cuestionario de este Diario.

El Boletín de Coyuntura Económica apunta una caída del PIB en el primer trimestre de más del 4 %, un descenso similar en apenas semanas a la del año 2011/2012 ¿Se prevé una crisis más grave incluso que aquella?

-Los dos primeros trimestres de este 2020 nos van a arrojar fuertes caídas del PIB, fiel reflejo de la inédita situación vivida, con un doble shock de oferta y demanda y reflejo del confinamiento vivido y una actividad económica prácticamente paralizada. Todas las economías avanzadas sufrirán bruscas caídas.

Siempre que no suframos un severo rebrote, será a partir del tercer trimestre cuando comience a recuperar tono nuestro PIB. Esta crisis respecto a la anterior se produce con unas empresas más equilibradas en su balance, menor apalancamiento, un sistema financiero más fuerte y una respuesta rápida en cuanto a herramientas como los ERTE o el cese de actividad para autónomos, así como en materia de liquidez que sin duda han permitido amortiguar mejor el fuerte impacto. Son crisis completamente distintas. En esta actual, la situación de partida es mucho mejor, si bien nos acompaña un importante freno a la demanda, la incertidumbre, fundamentalmente en el plano sanitario. Certezas y confianza en este sentido contribuirán a una recuperación más rápida.

¿Qué diferencias pueden advertirse respecto a la de 2008–

-Sumado a lo anterior, la respuesta en política económica de la eurozona ha sido en esta ocasión rápida y contundente. Son completamente diferentes, tanto en su origen y desarrollo como en las respuestas y medidas adoptadas para combatir sus efectos. La crisis de 2008 fue una crisis fundamentalmente financiera, originada por el estallido de burbujas inmobiliarias y de crédito. La actual no se origina por "no haber hecho bien las cosas". En esta ocasión se ha tratado más bien de un "cisne negro", un evento imprevisible de enorme consecuencias socioeconómicas, como ha sido la aparición y rápida extensión de un virus que ha obligado a confinar a la población y a cerrar las economías para evitar un colapso del sistema sanitario. Siendo la respuesta de política inmediata y contundente, se han sentado las bases para que el reinicio de la economía sea lo más rápido y eficaz posible.

¿Es previsible que la caída más grave en PIB y empleo se producirá en el último trimestre del año?

-El escenario base es que la economía recupere gradualmente tracción a lo largo de la segunda mitad del 2020, y que de cara a 2021 podamos disponer ya de un fondo de recuperación a nivel Unión Europea que contribuya a impulsar la reactivación económica en España y Aragón. Insisto en que si se produjera un fuerte rebrote de la pandemia que obligara de nuevo a tomar medidas de confinamiento, la situación se complicaría enormemente. Los problemas de liquidez podrían convertirse en problemas de solvencia para empresas y familias, y para la adopción de nuevas medidas de apoyo en política económica el margen de maniobra sería mucho menor.

¿La distribución del PIB entre sectores, más equilibrada en la economía aragonesa puede suponer una ventaja respecto al conjunto de España–

-Contar con cierta especialización relativa en el sector primario y en la industria manufacturera, además de una mayor apertura externa respecto al promedio nacional supone una ventaja. Una vez se recupere el comercio internacional, como se espera, y una vez los países que son nuestros principales socios comerciales recuperen ritmo para impulsar nuestras exportaciones. Por otro lado, las actividades más castigadas están siendo aquéllas que exigen un elevado contacto personal entre proveedor y cliente, característica típica de numerosos servicios, en particular en el turismo. Aun teniendo un peso importante en la economía aragonesa, el peso relativo es menor en comparación con otras comunidades autónomas. En este aspecto, por tanto, Aragón saldría comparativamente menos perjudicada.

¿Qué les dicen informes disponibles y expertos sobre hipótesis de recuperación y tiempos para la misma–

-Los analistas ya han descartado una recuperación en "V", es decir, una rapidísima reactivación de la actividad. Si bien parece que se repunte rápido, el alcanzar de nuevo los niveles previos puede llevar unos dos años. La incertidumbre sigue afectando a la demanda, al consumo y toma de decisiones sobre inversiones importantes de los hogares y a las inversiones empresariales. La velocidad de la recuperación en España y Aragón vendrá determinada en buena medida por el acuerdo al que finalmente se llegue en la UE para el diseño del fondo de recuperación.

¿Qué medidas se pueden adoptar desde el Gobierno para incentivar la economía–

-La prioridad ha sido superar la crisis sanitaria. En materia económica el presidente Lambán ha tenido claro que la mejor respuesta posible tenía que venir desde la unidad, coordinación y cooperación. Es la mejor forma de generar confianza, el mejor de los incentivos. El acuerdo alcanzado con la práctica mayoría de fuerzas parlamentarias, los agentes sociales, la Federación aragonesa de municipios, comarcas y provincias y el propio ejecutivo plasmado en las 273 medidas de la Estrategia Aragonesa de Recuperación Social y Económica sustenta perfectamente esta voluntad y una hoja de ruta en la que estamos ya trabajando de cara a la recuperación.

¿Y para garantizar la liquidez de las empresas? ¿Y en apoyo de los autónomos?

-Nuestro vector en la acción es el empleo, ya que creemos que supone mitigar una de las mayores incertidumbres y frenos a la demanda, conllevando preservar nuestro tejido empresarial. Desde principios de abril dimos respuesta en materia de liquidez. Era la principal preocupación que se nos trasladaba desde el ámbito empresarial. Para ello pusimos en marcha desde Sodiar y Suma Teruel moratorias en el pago de sus préstamos vivos y líneas de circulante para dotar de liquidez a pymes y autónomos con un montante de 13 millones de euros.

Desde Avalia, destinamos 40 millones en una nueva línea especial para avales de operaciones financieras. Adicionalmente, la pasada semana arrancaron desde Sodiar dos líneas de financiación adicionales. 10 millones para autónomos, pymes y entidades de economía social dirigidas a inversiones para adoptar medidas de seguridad en el reinicio de la actividad así como a la digitalización y fomento del teletrabajo. Invito a visitar la web de Sodiar para informarse directamente de estas medidas de apoyo y estímulo que permiten solicitudes telemáticas.

Acompañaremos estas medidas con convocatorias que subvencionarán adicionalmente estas inversiones. Y trataremos de estimular el empleo, tanto por cuenta ajena como por cuenta propia, subvencionando parte de las cotizaciones a la Seguridad Social, siguiendo las medidas recogidas en la estrategia de recuperación.

¿Hay preocupación por la posibilidad de que rebrotes generalizados ocasionen nuevos cierres de actividad ¿Se está notando en las comarcas que retrocedieron a la fase 2–

-La preocupación por un nuevo rebrote es una constante. Mientras sean selectivos y controlados como los que han surgido en nuestra comunidad, más allá del ámbito sanitario, la afección a la economía será mínima. El problema vendría de la necesidad en su caso de un nuevo confinamiento. Todavía es pronto para ver la repercusión de estas comarcas, esperemos que la rapidez en la decisión también haya permitido un impacto mínimo evitando "males mayores".

¿Se prevé un aumento del paro a registros superiores incluso que en la crisis iniciada en 2008?

-El peor dato de paro registrado en nuestra comunidad se produjo en marzo de 2013, con 116.855 parados. Es muy complicado en estos momentos hacer previsiones, todavía las incertidumbres, pero si continuamos con la inercia positiva de cierta recuperación que ya ha comenzado, esa cifra parece descartable. Todo ello siempre que no se produjera un fuerte rebrote de la pandemia, por supuesto.

En un escenario de incertidumbre ¿Cómo se verán afectadas las políticas activas de empleo?

-Más allá de las fuertes restricciones presupuestarias que hemos tenido para su desarrollo, cuanto cabe es reorientarlas. En el marco del Diálogo Social, analizaremos los colectivos más vulnerables tras esta crisis para llevar a cabo programas específicos. Y la prioridad adicional será la formación. Apostar por una cualificación y mejora constante de la misma para nuestros trabajadores, tanto desempleados como ocupados, supone permitirles ser más competitivos y mitigar un fuerte factor de desigualdad en una economía que cambia tan aceleradamente. Una prospección continua del mercado laboral nos permitirá ir adaptando esta formación continua a las necesidades que se vayan produciendo.

¿Qué evaluación hace de los ERTE como herramienta de control de los efectos de la crisis?

-Han constituido una herramienta fundamental en el ámbito laboral, económico y social. Junto a las prestaciones por cese de actividad para los autónomos son medidas pioneras que han permitido y permiten mitigar el fuerte impacto de esta crisis. Para los trabajadores y para las empresas.

El ritmo de descenso de afectados en nuestra comunidad es relevante. Fueron más de 120.000 los afectados en ERTE registrados en Aragón (serían más, por los que se presentaron fuera de nuestra comunidad) y la última cifra de final de junio facilitada por el Gobierno central era de 38.582. No quitamos importancia en absoluto a esta cifra, pero la disminución de afectados es síntoma de recuperación de la actividad.

¿Y del trabajo al respecto de su departamento?

-El trabajo ha sido y es ingente. Desde el aluvión de ERTE al diseño de respuestas y medidas extraordinarias ante una situación extraordinaria. Afortunadamente, el equipo humano que me acompaña es un equipo con gran capacidad de trabajo y enorme vocación de servicio. No cabe sino reconocer una vez más el enorme esfuerzo por parte del conjunto del Departamento.

¿Teme en cualquier caso que la avalancha de ERTE se convierta en avalancha de ERE?

-La causa que hipotéticamente pudiera conllevar esa situación sería estrictamente sanitaria. Apelo para evitar incluso pensar en ello a la responsabilidad individual y la prudencia para evitar fuertes rebrotes.

¿En qué punto esta el proyecto de los centros de Amazon? ¿Comenzarán las obras en los plazos previstos?

-Todo sigue dentro de los plazos previstos y esto es un dato muy positivo para nuestro futuro socioeconómico. Afortunadamente, sin afecciones.