Iberfoil pondrá en marcha el reciclaje de aluminio en 2023 y será un referente en España
El presidente del grupo Alibérico, Clemente González, presenta en Walqa el proyecto en el que invertirá 42,3 millones en la fábrica de Sabiñánigo
La ampliación de la planta de Iberfoil en Sabiñánigo está previsto que entre en funcionamiento en 2023, tras una inversión de 42,3 millones de euros y la creación de 40 puestos trabajo directos en una primera fase; y 75 en una segunda, además de unos 400 indirectos. El proyecto ‘Iberfoil Integra’ de reciclaje del aluminio, para pasar de una economía lineal a una circular, llega solo siete años después de que se pusiera en marcha una fábrica parada. El presidente del grupo Alibérico, Clemente González Soler, ha recordado que compraron los activos parados en un concurso el 14 de julio de 2014 y que solo dos semanas después, el 4 de agosto a las 5:30, comenzó el primer turno con 33 empleados. “Hoy, hay 110 personas y estamos desbordados”, ha asegurado.
“Nos preocupa el suministro de las materias primas. Vamos a un mundo cada vez más local, en contra de lo que la gente piensa, y menos global, donde la garantía de suministro de la materia prima será clave para los países, la economía y la industria”, ha comentado el presidente de Alibérico. González Soler ha presentado este lunes ‘Iberfoil Integra’ en el Parque Tecnológico Walqa, concretamente, en la Fundación del Hidrógeno, ya que proyecta usar esta energía.
En la presentación, participó el vicepresidente y consejero de Industria del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, quien ha resaltado que supondrá “un antes y un después para Sabiñánigo” y que será “un centro de referencia de economía circular” y “un proyecto estratégico de España”. El plan está en los despachos de las ministras de Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, e Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto.
El proyecto consiste en reciclar las chatarras de aluminio de sus 12 fábricas en España, fundirlas y fabricar bobinas de 6 milímetros de espesor, que después se pueden laminar hasta 6 micras. Además, el aluminio es “infinitamente reciclable” porque, a diferencia de otros materiales, no pierde calidad, ha destacado.
“Es un proyecto que va a garantizar el futuro de la fábrica de Sabiñánigo”, ha asegurado González Soler, quien ha resaltado la importancia del empleo industrial por su estabilidad y la riqueza que genera en el entorno. “Es la única fábrica que hay en España de aluminio de hoja fina, declarada esencial y estratégica por el Gobierno español porque somos los únicos fabricantes de material de aluminio en espesores finos para farmacia y alimentarios. Líderes europeos en ambos sectores”, ha comentado. Desde Sabiñánigo, se exporta a 10 países europeos. Alibérico está en siete autonomías y varios países de todo el mundo.
De este modo, consiguen independencia y garantía de materias primas, optimizan residuos -un asunto importante en el futuro- y logran una reducción drástica del 45 % del CO2 de la obtención del material. En este punto, Clemente González ha señalado que ahora se consumen 100 millones de toneladas de aluminio en el mundo, del que solo un tercio es reciclado, pero que en 20 años este último se va a duplicar. “Un crecimiento exponencial a nivel mundial y nosotros lo vamos a liderar en España”, afirmó. Además, también consiguen potenciar la economía circular, una reindustralización sostenible y riqueza social. “Va a ser muy importante para Sabiñánigo, para Huesca y para Aragón”, ha opinado.
“El futuro está hecho de aluminio”, ha asegurado Clemente González, quien ha detallado que la primera fase, hasta 2023, permitirá la producción de 25.000 Tn/año, y en una segunda fase (2024-2028), copia de la primera, 50.000. Será a partir de dos coladas continuas y cinco hornos, que están preparados para trabajar con un 15 % de hidrógeno. Además, su planteamiento es que puedan llegar a funcionar así al 100 %, para lo que quieren empezar a hacer pruebas.
La ampliación se llevará a cabo en una parcela de 45.000 metros cuadrados junto a la actual planta de 110.000. Allí se construirá un edificio industrial de 10.000 y otro de 20.000 metros como parque de chatarras. Para todo ello, se destinarán 42,3 millones de euros, una gran parte de los cuales proceden de los fondos de la compañía, además se han solicitado ayudas de diversos organismos y se está a espera de que lleguen fondos de recuperación Next Generation.
A la presentación han asistido también el presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia; la alcaldesa de Sabiñánigo, Berta Fernández; el director general de Industria, Javier Navarro; el director gerente de la Fundación del Hidrógeno, Fernando Palacín; el director gerente de Walqa, Luis Correas -ambos expertos en la generación de hidrógeno-; y Fernando Callizo, presidente de la CEOE Aragón en el momento de la compra de Iberfoil, al que Clemente González ha agradecido su apoyo igual que el de Arturo Aliaga. Además, también ha acudido el diputado provincial Joaquín Serrano.
