Comarcas

AYUDAS

El Gobierno destina 1.000 millones a la agroalimentación

El proyecto espera crear un impacto de 3.000 millones de euros y crear unos 16.000 empleos

Se prevé “dotar de la financiación y de las líneas de actuación necesarias para emprender los cambios medioambientales, digitales, sociales y económicos” a los que la agroalimentación deberá hacer frente en la próxima década.
Se prevé “dotar de la financiación y de las líneas de actuación necesarias para emprender los cambios medioambientales, digitales, sociales y económicos".
S.E.

El Consejo de Ministros aprobó este martes el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) del sector agroalimentario. A través de este plan, que contará con una aportación pública de 1.000 millones de euros en el periodo 2021-2023 y con el que se espera crear unos 16.000 empleos, se prevé “dotar de la financiación y de las líneas de actuación necesarias para emprender los cambios medioambientales, digitales, sociales y económicos” a los que la agroalimentación deberá hacer frente en la próxima década.

Según señalan en una nota de prensa conjunta los cuatro ministerios -Agricultura, Asuntos Económicos, Industria y Ciencia e Innovación- que han participado en el desarrollo de este “proyecto estratégico”, el Perte se concibe como “un conjunto de medidas que benefician a empresas y autónomos del sector agroalimentario” -formado, cifran, por un 96 % de pymes- y que generan “sinergias con unos objetivos claros. Con ello, se pretende fomentar el empleo de calidad en el sector, especialmente en el medio rural; fortalecer su competitividad y rentabilidad; y la vertebración del medio rural.

Ejes prioritarios de actuación

Los 1.000 millones que conforman el Perte, y que prevén generar un impacto de partida de 3.000 millones, contarán con tres ejes de actuación prioritarios. El primero de estos ejes contará con una inversión de 400 millones y se tratará de mejorar sus procesos de producción, vinculados con su competitividad, sostenibilidad y trazabilidad de la producción de alimentos.

El segundo montante, que con 454,35 millones es el más cuantioso, irá destinado a la transformación digital y desde los ministerios esperan que se extienda a todos los agentes que forman parte de su cadena de valor: agricultores y ganaderos y sus cooperativas, pequeñas y medianas empresas de producción, transformación y comercialización...

El último, con 148,56 millones, se destinará a la innovación e investigación “para lograr un sector agroalimentario competitivo en todos los eslabones”.

Impacto esperado

El Perte Agroalimentario, explican en el comunicado, va a contribuir a dinamizar al conjunto de la cadena, a través de “iniciativas que constituyan nuevos proyectos de transformación del sector y erigirse en un catalizador de iniciativas para modernizar el sector agroalimentario”.

Por ello, destacan que el Perte tendrá un impacto que asegurará un impulso a la transformación tecnológica del sector, con el uso de nuevas tecnologías así como del ‘big data’.

Además, se espera que el Perte contribuya a profundizar en el suministro de alimentos sanos, seguros y saludables que ayude al proceso de descarbonización; refuerce la dimensión y la cohesión social con el apoyo a jóvenes, a colectivos vulnerables y a la incorporación de la mujer; y fomentar la economía circular y así reducir el impacto ambiental del sector.