Comarcas

COLABORAN: CAJA RURAL DE ARAGÓN Y DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE HUESCA

Javier Allué: “Huesca es un ejemplo de dinamismo y destaca sobremanera por su tono vital”

#CONTRALADESPOBLACIÓN

Javier Allué.
Javier Allué.
Luis Correas/Gobierno de Aragón.

El Comisionado para la lucha contra la despoblación del Gobierno de Aragón resalta la importancia de la Ley de Dinamización para que en cualquier normativa o proyecto se tenga en cuenta su repercusión en el medio rural.

Aragón mantiene su población por el crecimiento de Huesca. ¿Cómo ha evolucionado en estos últimos años?

—Huesca lleva cinco años con crecimientos nunca vistos. En Aragón, la evolución positiva se da especialmente desde 2018 y 2019, después de que en 2015 este gobierno entrara en acción, se frena la caída y empieza a crecer. Según los datos del INE en la última década, hay una pérdida global de 23.152, pero es que desde 2012 a 2015, Aragón perdió más de 40.000 habitantes y se ha ido recuperando. Prácticamente todas las comarcas tienen un crecimiento, cuando hasta hace no mucho se perdían cifras de cuatro dígitos.

¿A qué se debe el cambio?

—Al dinamismo de la sociedad aragonesa -la turolense, la oscense y la zaragozana- y a tener clara una idea desde la administración pública regional, en cumplimiento óptimo del ejercicio de nuestras competencias que nos mandata corregir los desequilibrios territoriales. Sea cual sea el lugar donde se viva, nos dedicamos a consolidar y mejorar los servicios básicos, generar oportunidades de crecimiento y empleo. Y además de manera interprovincial. Los últimos indicadores nos hacen estar en las primeras posiciones en calidad de vida, salud, educación, servicios sociales… Somos líderes en datos de confianza empresarial, en saldo migratorio interautonómico…

¿Vamos a seguir creciendo?

—Según la proyección de población hasta 2030, sí. Invertimos en sectores estratégicos como la nieve, el turismo rural...; en servicios básicos como el Hospital San Jorge, nuevos centros de salud...; se han hecho más de 20 declaraciones de Interés Autonómico, que generan miles de empleos... Tenemos capacidad de generar acciones interdepartamentales porque la lucha contras la despoblación no es lo que hace este comisionado, sino todas las acciones del Gobierno de Aragón. Todo eso se recoge en la Ley de Dinamización del Medio Rural, que ya se han hecho las enmiendas.

¿Llegará a aprobarse antes del fin de la legislatura?

—Espero que vea la luz porque es un mecanismo rural de garantía. Es poner por ley que sea el instrumento, cualquiera que sea la planificación de los departamentos, que conlleve un análisis sobre el impacto que pueda tener en el medio rural; además de un compendio de medidas multisectoriales, con un caracteres multinivel, con mecanismos de gobernanza y coordinación entre las administraciones, especialmente las entidades locales. Un ley que tenga en cuenta una fiscalidad diferenciada...

Fiscalidad diferenciada, por ejemplo, ¿en la montaña?

—Municipios de montaña o áreas como La Guarguera. Es un reconocimiento al esfuerzo de los que viven allí, pero lo importante es que esta ley conllevará la modificación del texto refundido de la ley de tributos cedidos y llevará un título: Fiscalidad aragonesa del medio rural de Aragón. Cada gobierno realizará un análisis y, sin duda, generará un debate obligado. Es algo novedoso que se consigue por primera vez.

¿Qué otros aspectos contempla la ley?

—Hay un artículo importante por el que se tendrá que publicar en los presupuestos un anexo específico cuantificado, referente a esta ley. No saldrán menos de 2.000 millones de euros. La acción y la repercusión de este Gobierno en el medio rural tiene unos porcentajes altísimos. Más de la mitad del presupuesto va destinado a servicios básicos y es voluntad política la consolidación de los mismos. Además, el efecto del IAF o Inaem para el fomento y la creación de empleo es muy alto en el medio rural. Se apuesta por los sectores estratégicos que generan empleo y la sociedad de Huesca es un ejemplo de dinamismo y destaca sobremanera por su tono vital, también a nivel nacional. Aragón es una de las regiones con más proyección de España y polo de atracción con saldo interior.

Lo que no se consigue es una financiación autonómica que contemple la dispersión territorial y el envejecimiento de la población.

—La orografía, el sobreenvejecimiento, la dispersión territorial... son variables que están reconocidas en la reforma del Estatuto de Autonomía de 2007, del que ahora celebramos su 40 aniversario. Hace tiempo que vamos detrás de un modelo de financiación que tenga en cuenta el coste efectivo de prestar los servicios, porque mantener escuelas con menos de seis alumnos, como ha decidido sin dudas este Gobierno de Aragón, cuesta más dinero que en las áreas urbanas. Es una eterna pelea que Aragón siempre lidera.

¿Qué sectores considera estratégicos en la lucha contra la despoblación en Huesca?

—El sector estratégico más vinculado a la lucha contra la despoblación es el agroalimentario. Los agricultores y ganaderos son los que más fijan población, de ahí que este Gobierno esté empeñado en invertir, modernizar regadíos, incorporar a jóvenes agricultores…

¿Qué otras líneas estratégicas tiene el Comisionado?

—Observar que el mecanismo rural de garantía que va a estar por ley se cumpla, pero además la relación con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Hemos conseguido una reivindicación histórica: tener un Fondo de Cohesión Territorial Específico, que se reparta con criterios de reto demográfico. Recibimos una especie de anticipo, 578.000 euros, e hicimos un programa de la mano de Aragón Emprende, Erea, de impulso a ecosistemas de emprendimiento y de la economía social del medio rural de Aragón, que lo hemos trabajado desde Aragón, Castilla-La Mancha... para que de esa cantidad a repartir no se lleve Madrid lo mismo. Aragón se llevará un 1,2 millones, un 8 %, que llegará el año que viene, pero haremos un Erea +, para que participen grupos de acción local, entidades de economía social, asociacionismo femenino rural... Y queremos destacar la iniciativa emprendedora que hay en el medio rural, que es otra de las prioridades, que no debemos de dejar de explorar.

¿Qué proyectos le han llamado más la atención?

—Una fábrica de cervezas en Aineto, en La Guarguera, la recuperación de olivos en Oliete... y fabricaciones de todo tipo. También estas páginas del Diario #contraladespoblación, con la colaboración de Caja Rural de Aragón, porque se hace un trabajo muy bueno para que se vean posibilidades en el medio rural y que si quieres, puedes. Las oportunidades están y las administraciones públicas de Aragón están detrás de cualquier iniciativa emprendedora para hacerle el seguimiento, desde el IAF, a través de Aragón Emprende. El próximo año presentaremos los datos definitivos de Erea y lo que haremos con los fondos de cohesión. Esta es otras de las líneas de trabajo con la secretaría del Reto Demográfico, con Paco Boya al frente.

Se critica que hay muchas medidas o planes y se exige más coordinación y acción, ¿cómo se trabaja con otras administraciones?

—Estamos en conexión con el Reto Demográfico del Miteco y con la ley se ganará coordinación con las diputaciones, ayuntamientos... pero el abordaje conjunto de determinadas políticas con las administraciones locales es algo que tenemos que mejorar y lo quiero hacer a través de la comisión delegada del Gobierno para la política territorial. Hay temas como vivienda o banda ancha, donde se están dando pasos de gigante. No olvidemos que en 2015 había 50 municipios con internet y hoy el 97 % tienen 30 megas. Huesca tiene buenos datos porque la Diputación hizo un gran trabajo, coordinado con la DGA.

¿Qué seamos una provincia pionera puede servir de efecto llamada?

—Sin duda. Cualquier nuevo poblador que quiera instalarse en un sitio una de las cosas que preguntará será si hay banda ancha, consultorio médico...

Y preguntará también por vivienda, pero es uno de los mayores problemas.

—No quiere decir que falte vivienda sino que hay miles y miles desocupadas en el medio rural, y se están haciendo acciones como propuestas públicas de rehabilitación en coordinación con las entidades del municipio. Es un problema que tiene solución y se están dando pasos.

Esta sección se creó hace cinco años, ¿ha cambiado la situación en este tiempo?

—Echando la vista atrás, nos queda por hacer, pero se están dando pasos y somos ejemplo de medidas contra la despoblación. Tenemos que valorar más lo que hacemos en Aragón, porque nos miran con lupa, desde los primeros documentos estratégicos hasta la propia ley y muchas iniciativas. Son importantes proyectos como Zona Zero, que recibió la Medalla al Mérito Social del Gobierno de Aragón, la declaración de las navatas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, la apuesta por el turismo, por la nieve, las inversiones en carreteras...

¿Ha cambiado la percepción sobre el medio rural?

—Creo que nunca ha sido mala.

¿Sobre sus oportunidades?

—El hecho de que esté en las agendas, la labor de medios de comunicación, como el Diario del AltoAragón, Aragón Radio o Aragón Televisión, que han hecho una labor de vertebración territorial importantísima... hacen que sea mucho más fácil decidir, pero respetando la libertad de cada uno.

¿Ha encontrado soluciones?

—La solución será comarcal o no será. Tiene que haber una concepción comarcal de que todo lo que hay en la comarca es de todos. Aragón tiene una estructura comarcal que no tienen otras regiones, el proceso de descentralización comarcal es el más importante que se ha hecho en Europa, para acercar la prestación de servicios. Eso no quiere decir que cambien las densidades de población de hoy para mañana, pero el freno a la sangría demográfica ya es un hecho.