TRADICIONES
El Lunes de Pascua abre el período de romerías con gran presencia
Multitud de altoaragoneses han peregrinado para ver a sus santos en Barbastro, Monzón y Binéfar
en una completa jornada festiva

Lunes de Pascua, día festivo y día de romerías. Miles de vecinos del Alto Aragón han abierto este lunes el período de romerías y han salido a las calles con devoción para ver a sus santos. Los tradicionales actos de la jornada se han completado con actividades litúrgicas, almuerzos y música bajo un día soleado que ha permitido reencuentro de familiares y amigos.
Los vecinos de Barbastro y de Berbegal han iniciado el calendario de romerías al monasterio de El Pueyo donde se ha mantenido el culto a la Virgen patrona de la ciudad y de muchos pueblos del Somontano. Desde el año 1101 lo es de la Diócesis de Barbastro por iniciativa del obispo San Poncio, aunque la costumbre se remonta a 1580.
La novedad de este año han sido los nuevos accesos al monasterio gracias a la Diputación Provincial de Huesca que los ha dejado en condiciones adecuadas para los numerosos visitantes que llegan al monasterio. La romería ha salido desde Plaza del Sol con participación de los alcaldes Fernando Torres (Barbastro) y José Carlos Boned (Berbegal), Daniel Gracia, presidente de la Comarca, Maribel Gracia, diputada provincial, Jorge Belloc, presidente de Amigos del Pueyo, Damas de Fiestas de Barbastro. y concejales de ambos ayuntamientos, entre otros.
José Mairal, canónigo del Cabildo de la Catedral, ha rezado el Rosario hasta los accesos a la iglesia que tiene consideración de “altar privilegiado” por concesión del Papa Inocencio XIII, en 1625, y está agregada a la basílica de Santa María la Mayor (Roma) desde 1818. En los accesos se ha realizado la bendición de cruces entre las del Pueyo, Barbastro y Berbegal.
El obispo Ángel Pérez ha presidido la misa “de ángelis” cantada por los monjes del Instituto del Verbo Encarnado que regentan el monasterio, y la homilía del canónigo Mairal se centró en torno a la devoción mariana a la Virgen del Pueyo. El reparto de panes bendecidos ha sido al final de la misa con antelación a besar la medalla de la Virgen en el camerín donde destacan las pinturas restauradas de Francisco Bayeu (siglo XVIII).
El Ayuntamiento de Barbastro ha ofrecido un refrigerio y también ha habilitado un autobús a disposición de personas interesadas en asistir a la misa. A partir del Lunes de Pascua comenzará un intenso calendario de romerías para asociaciones, cofradías y pueblos del Somontano durante los meses de abril a junio.
La Alegría
Por su parte, en la localidad de Monzón, cientos de personas han ido a pie desde la ciudad a la ermita para venerar a la Virgen de la Alegría. Un recorrido de unos cinco kilómetros que parte del camino del Romero y concluye en el Camarín, donde los asistentes se detienen a reponer fuerzas con un almuerzo. Concretamente esta edición se han repartido 200 kilos de longaniza, además de roscones, huevos fritos, torta y vino.

Esta tradición, que se extiende ya desde hace medio siglo, es la segunda en importancia tras San Mateo el 21 de septiembre y cada año gana más adeptos en la capital del Cinca Medio. “Visitamos a nuestra querida Virgen de la Alegría y nos encontramos con familiares y amigos, pasando un día magnífico y único en el calendario”, ha indicado el alcalde de Monzón Isaac Claver, que ha formado parte de cada una de las actividades diseñadas para la jornada.
A las 08:00 horas han comenzado a peregrinar los primeros montisonenses hasta el cerro de Lascellas. El obispo de la Diócesis de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, ha presidido la misa en la capilla de la ermita a las 09:00 horas, antes de comenzar el almuerzo de hermandad. Después, la jota ha pasado a ser protagonista con la agrupación folclórica Aire Monegrinos que ha seguido amenizando el día con la asistencia de Elisa Huerva, finalista del programa televisivo Jotalent.
Tras cumplir con la virgen, los romeros se han reunido en los campos, fincas y torres para compartir con amigos y familia la comida y una larga sobremesa y así celebrar un día que “los montisonenses aguardan con muchísimo cariño”, ha concluido el alcalde.
San Quílez
Mientras tanto, la romería a la ermita de San Quílez, en la sierra del mismo nombre, ha recobrado el pulso y cientos de binefarenses y comarcanos se han sumado a esta celebración.

Ya sea cubriendo el trayecto a pie, en su vehículo propio o en el autobús que habilitó el Ayuntamiento, alrededor de más de un centenar de personas han salido de la plaza España a las 9:30 horas. Esta edición ha contado con el apoyo del consistorio, las peñas, así como de Scouts Binéfar y Cruz Roja.
En la explanada junto a la ermita se han concentrado para participar en el almuerzo y vermú posterior, así como en los actos religiosos y demás juegos que se han propuesto, como la subida al palo para tocar la campana. En resumen, un día de familia y amigos para celebrar una antigua tradición.