AGRICULTURA
Castejón de Sos enseña la biodiversidad de sus huertos
Se han impartido talleres a vecinos y turistas con una buena respuesta

Bajo el título “Nuestros huertos, fuente de salud y bienestar”, el Ayuntamiento de Castejón de Sos, con la financiación de la Diputación de Huesca, ha continuado con la promoción de talleres de educación ambiental para dar a conocer la biodiversidad de los huertos del municipio, los conocimientos ecológicos tradicionales, algunos remedios para plagas y creencias y refranes en torno a ellos con muy buena respuesta por parte de la población.
“El objetivo general de las jornadas -detalló la bióloga Helena Parga, encargada de las actividades- ha sido acercar a la población al huerto y la agrodiversidad, promoviendo el uso, la producción, el mantenimiento y la conservación de la biodiversidad agrícola de nuestra zona. Se ha pretendido que el habitante descubra los huertos de Castejón de Sos cómo fuentes de vida y salud y la agricultura cómo actividad tradicional”.

Esta campaña, iniciada en 2022, ha avanzado con propuestas que han incluido salidas para el estudio de controladores de plagas como los murciélagos, otras para el estudio de polinizadores como las mariposas, anillamiento de aves para entender su papel en el ecosistema o análisis de fuentes y manantiales que usan el suelo como filtrador.
La afluencia ha sido “extraordinaria” e incluso ha habido gente que se ha quedado en lista de espera. “Estos talleres se han ofrecido a vecinos y turistas y a todas las edades. Hemos hecho actividades con la Escuela de Verano cuyos niños han hecho el jardín de polinizadores y instalado cajas nido para quirópteros, murciélagos y mariposas y comederos para aves. Han trabajado el huerto con los abuelos de la residencia y hemos hecho un acercamiento muy bonito entre generaciones en torno a una actividad tradicional”, resaltó Parga, de la empresa Pirinature.

La bióloga avanzó que el ciclo incluye para los próximos días charlas en torno al valor de las semillas tradicionales, “que es parte de nuestro patrimonio genético agrícola que nos asegura la calidad y la soberanía alimentaria”, dijo, apostando por “alimentos nutritivos y culturalmente adecuados, asequibles, producidos de manera sostenible y ecológica”, concluyó.