Plan y Chía festejan 50 años de una pista que piden sea carretera

Los ayuntamientos de Plan y Chía van a celebrar los 50 años de la pista que conecta los valles de Chistau y Benasque, sin perder de vista la histórica reivindicación de que esta comunicación se transforme en una carretera asfaltada y transitable todo el año.

Los alcaldes de ambos municipios, por los que discurre la pista que conecta Sobrarbe y Ribagorza, quieren compartir la efemérides con el resto de munícipes de ambas comarcas, así como con los habitantes de los territorios, con otras autoridades comarcales y provinciales y, además, con personas que hace medio siglo contribuyeron a abrir esta vía de comunicación que aún sigue aspirando a convertirse en una carretera con carácter vertebrador. Santiago Marraco, ingeniero de Montes y expresidente del Gobierno aragonés, y el ingeniero que diseñó el trazado de la pista están entre los invitados.

Los dos ayuntamientos anfitriones han organizado una celebración para el sábado 7 de octubre en el refugio de Marradetas, situado en el puerto de Sahún, en el municipio de Plan y prácticamente en la mitad del trazado de la pista. José Manuel Buisán, encargado del refugio, también participa en la organización del encuentro, que incluirá un ágape en el edificio que regenta, situado a 2.000 metros de altura. Allí, seguro que se recordará a los impulsores de esta conexión, entre ellos a los alcaldes de Plan y Chía en ese momento, según comenta el actual primer edil de la localidad ribagorzana, Enrique Barrau, que reconoce que la construcción de la pista “fue un paso importante para los dos valles”, y no solo Plan y Chía, ya que sirve para conectar las dos comarcas y, en el caso del valle de Benasque, como vía de acceso a Francia a través del túnel del Bielsa.

Del mismo modo, el alcalde de Plan, José Serveto, asegura que es una conexión muy transitada por los vecinos de ambos territorios, por turistas, por buscadores de setas o por motoristas y todoterrenos, por lo que considera que su conversión en carretera es una reivindicación justificada. Como ejemplo del “trasiego”, asegura que en verano, “la mayoría de fines de semana el refugio está lleno para comer”. Reconoce, sin embargo, que la mejora de la pista en estos momentos está “parada”. 

“Han hecho proyectos con túneles, que son inviables”, apunta, y añade que abogan por mantener el actual trazado, pero arreglándolo, ya que -explica- se pueden cruzar dos vehículos prácticamente en toda la pista. El alcalde de Chía también reclama que “haya comunicación” entre los dos valles.

La pista es de titularidad municipal y gestión autonómica, pero la Diputación Provincial de Huesca ha actuado en su conservación y arreglo. Buena parte del año está nevada por lo que su uso se restringe, básicamente, al periodo comprendido entre mayo y octubre.