ACTIVIDADES NAVIDEÑAS
Los montañeros dejan su estampa navideña en cada cumbre
Los clubes han organizado caminatas para visitar y colocar todos los belenes
Sin importar las condiciones, la altura o las dificultades, la fe de los montañeros ha vuelto a empujarles este mes de diciembre rumbo a la cima. Numerosos miembros de los clubs de montaña han peregrinado para visitar o colocar los belenes que se encuentran en las cumbres y enclaves patrimoniales a lo largo y ancho de todo el territorio.
El Centro Excursionista Ribagorza (CER) ha colocado este año dos belenes en las montañas ribagorzanas, ya que al tradicional Belén que se sube al Turbón desde hace 14 años, se ha sumado otro de características similares en la Peña del Morral. El belén del Turbón, el más alto de Aragón a 2.492 metros, se colocó el 6 de diciembre por unos 30 socios del club y se recogerá en primavera. Por su parte, el de la Peña del Morral, se colocó en una oquedad de la vía ferrata del mismo nombre por la nueva sección ferratera del CER en una actividad que contó con la participación de media docena de socios y algunos miembros de Los Andarines de Zaragoza.
Por su parte, en el Alto Gállego, en estas fiestas se colocan belenes en ermitas y en los montes. La Hermandad de Santa Elena de Biescas es tradicional que coloque uno en la cueva de la cascada de Santa Elena y otro en la propia ermita. En esta actividad participaron unas 20 personas. Y la Asociación Cultural Erata de Biescas lo pone cada año en la ermita de San Benito, en el monte de Erata, hasta allí llegan andando. También Grupos de Montaña de Sabiñánigo (GMS) llevan un Belén hasta una de las cuevas del monte de Santa Orosia.
Asimismo, la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Jaca realizó la colocación de su belén peregrino en Casa Bergosilla, cerca de Torrijos (entre Jaca y Castiello). La asociación agradece la amabilidad de Jacobo Casanova, que facilitó su instalación. A su vez, el Club Pirineísta Mayencos de Jaca colocó su tradicional belén montañero en la cima de la peña Oroel, hasta la que ascendieron casi 30 socios. Con ese entrañable acto, el club puso fin a la temporada y ya prepara su actividad estrella para 2024: el trekking al Kanchenjunga, la tercera montaña más alta del mundo.
Igualmente, Montañeros de Aragón, que cumplirá 75 años en 2024, sigue la costumbre del Belén montañero cuyos orígenes se remontan al 21 de diciembre de 1969 con el primero en la cima del Cotiella (2.912 m). Este año se eligió Betesa, en el municipio de Arén, en ruta de las ermitas, con asistencia de más de 50 senderistas, entre niños, jóvenes y veteranos. La sección de Alta Montaña eligió la cima del Pico de la Montañeta (2.552). El belén urbano hasta la Peñeta se celebró anoche en Barbastro con antorchas por los barrios de San Joaquín, San Juan y Entremuro donde se bendijo el nacimiento y hubo reparto de torta con chocolate.
En las profundidades
No solo en las alturas, sino también en las profundidades, los montañeros han peregrinado para visitar estas representaciones. En la sima de Esteban Felipe (-123 m.), cada año grupos de espeleología se acercan a visitar las figuras del belén colocado en la oquedad de la cueva.
De la Sierra de Guara a los Monegros, este año, el club de montaña y senderismo ha montado un belén en Lagunarrota (Morilla). 30 integrantes de este club deportivo quisieron celebrar la Navidad montando las figuras en el castillo el pasado domingo 17 de diciembre y, como ellos destacan, “todo hecho con materiales biodegradables”.
Finalmente, a lo largo de esta misma jornada, la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM) programó la colocación de un belén la Peña de los Mallos de Riglos. La caminata de 10 kilómetros mereció la pena para disfrutar después en el refugio de un comida grupal.
