Hallan muerto a un montañero zaragozano en el pico Frondiellas

PANTICOSA.- El cuerpo sin vida de un montañero zaragozano de 64 años de edad ha sido localizado este martes en la zona del Pico Frondiellas, en el municipio de Panticosa, por la Guardia Civil, que lo estaba buscando desde última hora de la tarde del pasado lunes.

HAZ CLIC AQUÍ PARA VER UN VÍDEO DE LA OPERACIÓN

Esta muerte eleva a cuatro el número de fallecidos en accidentes de montaña en la provincia en lo que llevamos de agosto (al margen del ciudadano mexicano que sufrió un paro cardíaco en el valle de Vió) y se produce solo tres días después del que hasta este martes era el último accidente mortal que le costó la vida a una montañera madrileña de 49 años tras caer por una ladera en el pico del Monje (Astún). Con anterioridad habían fallecido un ciudadano francés de 57 años en la senda de los Caracoles (Bierge) y otro montañero zaragozano de 75 en el pico Gabarda (Panticosa).

La Guardia Civil, según han explicado fuentes de la Oficina Periférica de Información de la Comandancia de Huesca, recibió a las 19:40 horas del pasado lunes un aviso después de que un familiar del montañero zaragozano hubiera alertado de que éste no había regresado y ni era posible comunicar con él.

El hombre había salido el día anterior (domingo) para realizar una ruta por los Ibones de Arriel con la idea de pernoctar en la zona esa noche (para lo que iba equipado) y ascender, al día siguiente, al pico Frondiellas.

Tras recibir el aviso, la Guardia Civil inició gestiones y localizó el vehículo del montañero estacionado en el aparcamiento del embalse de La Sarra, por lo que efectivos del Ereim de Panticosa iniciaron desde ese punto la búsqueda al no poder hacer uso del helicóptero por las condiciones meteorológicas. Sobre la una de la madrugada localizaron una tienda de campaña que podía pertenecer al desaparecido, por lo que continuaron la búsqueda por la zona en medio de una intensa lluvia. Ya casi de madrugada y totalmente mojados, los efectivos regresaron a Panticosa para cambiarse de ropa y proseguir a pie la inspección del terreno, ya que seguía lloviendo.

Por la mañana salieron seis especialista que, una vez que dejó de llover, contaron con el apoyo del helicóptero con base en Benasque. Sobre las 14:30 horas, en uno de los vuelos de reconocimiento vieron un cuerpo inmóvil en una canal del pico Frondiellas, a unos 2.900 metros de altitud. Tras llegar a él comprobaron que el cuerpo tenía lesiones incompatibles con la vida. Fue porteado en una camilla unos 50 metros por una pedrera muy inestable y empinada hasta llegar una zona donde el helicóptero lo recogió para trasladarlo a Panticosa y desde allí al depósito de cadáveres de Jaca para practicarle la autopsia.