OJO AVÍZOR
Las plantas aromáticas y medicinales como oportunidad de negocio
Las jornadas pretenden favorecer la actividad debido a que la provincia dispone de producto
La provincia de Huesca cuenta con un gran potencial agronómico y natural para desarrollar. Con estas miras, la Diputación Provincial de Huesca tiene en marcha el proyecto “Observatorio Reto Demográfico”, dentro de la línea de ayudas a proyectos innovadores para la transformación territorial y la lucha contra la despoblación (Orden TED/1358/2021, de 1 de diciembre), impulsada por la Secretaría General de Reto Demográfico, entre cuyas líneas de acción está prevista el “Fomento del emprendimiento y actividad empresarial en el sector primario y su transformación”.
En este marco, la Diputación Provincial entiende la necesidad de impulsar actuaciones que ayuden favorecer la creación de nuevas oportunidades en el ámbito rural, siendo una de ellas la producción de plantas aromáticas y medicinales y su transformación de forma local. Los beneficios ambientales que reporta el aprovechamiento sostenible y cultivo de este tipo de plantas son múltiples: se protege el medio natural y la biodiversidad, supone una defensa contra la erosión, el aprovechamiento de tierras marginales o en régimen de co-cultivos, la posibilidad de desarrollo de la apicultura, etc.
Tras la realización y el éxito de una charla de presentación y divulgación en Graus el pasado junio, la entidad pública dice que quiere “replicar la misma en diferentes puntos de la provincia para posibilitar la asistencia de todas las personas interesadas” en el territorio oscense.
Para ello, ha organizado la jornada “Las plantas aromáticas y medicinales como oportunidad de pequeños negocios en la provincia de Huesca” que se celebrará con el mismo programa en cuatro localidades. Quienes deseen acudir en cada enclave, deben inscribirse en la página web de la Diputación Provincial de Huesca, en el enlace: https://www.dphuesca.es/jornada-plantas-aromaticas
Según el programa preparado, el próximo martes se ha previsto la jornada en Huesca capital, en el Centro de Archivo Documental y de la Imagen de la Diputación de Huesca, C/ Gibraltar 13. El miércoles 27 se organizará en Binéfar, en el Centro Cultural, C/ Lérida 77. El jueves día 28 será en Sariñena, en el Salón Antonio Beltrán, Plaza Constitución 21. Y el día 5 de octubre tendrá lugar en Jaca, en la Casa de la Cultura María Moliner (Biblioteca Municipal), C/ Levante 4. En cada uno de estos lugares, la jornada comenzará a las cuatro y media de la tarde con la recepción de los participantes. A las cinco será la apertura a cargo de representantes de la Diputación Provincial. A las cinco y diez, Juliana Navarro Rocha, investigadora del Departamento de Ciencia Vegetal del Cita hablará de “Alternativas de cultivo con plantas aromáticas y medicinales en Huesca”. A las seis, Savia Íbera, destilería artesana especializada en aromaterapia, y Juliana Navarro presentarán un proyecto de aprovechamiento de flora silvestre y abordarán el muestreo de la flora medicinal y aromática. A las siete de la tarde, tras una pausa-café, se presentará un modelo de negocio rural de una destilería de aceites esenciales e hidrolatos. Y a las ocho será la clausura.
Esta actuación está financiada al 90 por ciento por el Ministerio para la Transición Ecológico y el Reto Demográfico y al 10 por ciento por la Diputación Provincial de Huesca.
Una de las ponentes en esta jornada, Juliana Navarro, investigadora de la unidad de Recursos Forestales del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (Cita) considera que la producción, transformación y venta de plantas aromáticas y medicinales ofrece “una infinidad de posibilidades de negocio”.
Juliana Navarro argumenta que en este sector hay un nicho de mercado que se está explotando, “pero creo que se puede explotar más porque lo que ya hay son algunos casos de éxito, o de intento, por lo menos de transformación de algún producto que viene de plantas o de sus extractos para un producto final como puede ser el aceite o cosmética, por ejemplo. Lo que no veo aún es que acabe de arrancar la parte productiva, que el agricultor deje un poco de lado los cultivos tradicionales y se ponga a producir esto”. La investigadora explica que el agricultor no está acostumbrado a estos cultivos, porque no son anuales ni son perennes, “y por eso la inversión es mayor, la maquinaria no es la habitual, y todo conlleva a un cambio más fuerte en el campo. Ese cambio en los cultivos los estamos intentando impulsar con estas jornadas donde queremos explicar que en este sector hay un nicho de mercado, por eso presentaremos también proyectos que ya están en marcha en esta provincia y en otras partes de Aragón y que son muy replicables”.
Estudiar y promover el cultivo de plantas aromáticas y medicinales en la comunidad de Aragón, dice la investigadora del Cita que tiene su relevancia “por la gran abundancia de su flora silvestre para estas especies. Además, una gran cantidad de estas especies se adaptan a las condiciones de suelos (calizos, de baja fertilidad, a veces salinos) y a la baja pluviometría registradas”.
El Cita lleva más de 20 años investigando en plantas aromáticas. En 2003 se publicó el estudio “Investigación y experimentación de plantas aromáticas y medicinales en Aragón: cultivo, transformación y analítica” del investigador Jesús Burillo. Además, en el Cita se cuenta con una planta piloto de destilación a vapor y extracción orgánica de plantas aromáticas para acercar la investigación a agricultores y empresas de Aragón en este sector.
Juliana Navarro incide en que el Cita no tiene un servicio de asesoría como tal, “pero sí intentamos dar la mayor cantidad de información cuando nos vienen a pedir ayuda. Por eso, insisto mucho en el cooperativismo en los inicios de la actividad, que se conozcan entre ellos, porque al comienzo de un proyecto nadie tiene la competitividad, y lo mejor es que los interesados se junten y consigan sacar un pequeño negocio”.
Conocemos que, desde hace más de 60.000 años, el hombre ha empleado las plantas recogidas en la naturaleza para su alimentación y para otros muchos usos: medicinales, obtención de fibras y madera, conservación y aromatización de alimentos, droguería y cosmética.
En cuanto a la extracción de las plantas y su posterior uso, a partir de numerosos escritos y dibujos se sabe que se realizaba ya en las culturas de civilizaciones muy antiguas. Así, se conoce la utilización en Egipto del aceite de cedro y el uso del alambique de destilación al menos desde el siglo XXV a. de C.
En la época de la Grecia clásica tomaron impulso los estudios acerca de las características y las propiedades de las especies vegetales. Aristóteles asignó a cada planta las virtudes entonces conocidas e inició una clasificación vegetal, que amplió el botánico Teofrasto, siguiendo unas pautas científicas. Las plantas utilizadas como conservantes o aromatizantes durante siglos fueron una expresión de riqueza y un medio de transacciones comerciales y pago de impuestos.
