Cinca Medio

ACTIVIDADES DE VERANO

Conexión y mayor autonomía, las claves del campamento de Down Huesca

Han sido 30 los usuarios de este campamento que pone hoy su punto final

Los usuarios de Down Huesca visitan una granja de ovejas.
Los usuarios de Down Huesca visitan una granja de ovejas.
Down Huesca

CON el Covid relegado -casi- a recuerdo, la “nueva normalidad” camina al patíbulo en aras de la antigua. La de los abrazos que se olvidan de choques de codo con perímetro de seguridad; la de las reuniones de amigos sin sonrisas imaginadas tras una tela quirúrgica; la de vivir.

Esa vieja -y anhelada- forma de vivir es de la que han disfrutado los 30 jóvenes en el campamento organizado por Down Huesca, y que finaliza hoy, en el Albergue y Escuela de Vida Independiente La Sabina, de Fonz.

La vieja normalidad ganó en esta semana de convivencias llena de visitas y talleres en la que se entremezclaban ratos de piscina y bailes; un taller de pintura, una fiesta de disfraces o una búsqueda del tesoro.

Y también excursiones con las que conocer los rincones de la provincia, observar las estrellas y, en definitiva, disfrutar de unas vacaciones de verano repletas de aventuras en el medio rural. Graus, Panillo y Ainsa son algunos de los puntos visitados por este grupo de jóvenes.

Entre sus excursiones destaca la visita a la posición de artillería de Fonz durante la Guerra Civil. También fueron ellos los sorprendidos cuando en Binefar les visitaron y acompañaron en talleres, los usuarios del Centro Ocupacional Nazaret de Cáritas Diocesana Barbastro-Monzón.

Unas actividades que han repercutido positivamente en los jóvenes usuarios de las asociaciones Down Huesca y Las Cañas de Alcañiz. Así lo remarcó el psicólogo e impulsor de la Escuela de Vida Independiente, Elías Vived: “Están disfrutando mucho del campamento y de sus diversas actividades” y añadió: “Se está creando un clima de conexión entre ellos que no se podría conseguir de otra forma”.

Aunque estén acompañados por algunos padres, profesionales y el psicopedagogo, la convivencia fuera del hogar ayuda a desarrollar la autonomía de estos jóvenes con discapacidad intelectual. “Desde poner las mesas, ducharse, vestirse, recoger, … todo viene fenomenal para conseguir autonomía para ellos, y además hay que tener en cuenta el respiro familiar que supone esta iniciativa”, apuntó Jesús Falceto, psicólogo de Down Huesca, que considera que el albergue La Sabina “debe de tener un gran empujón con diferentes actividades para personas con o sin discapacidad intelectual”.

El campamento dará por finalizados siete días con una cena y una fiesta, esta vez de despedida, hasta su próxima edición.