Trabajadores de Ferroatlántica se concentran en la planta y cortan veinte minutos uno de los acceso al polígono Paúles

HUESCA.- Trabajadores de la fábrica de Ferroatlántica del Cinca, de Monzón, se han concentraron este viernes a las puertas de la factoría y han cortado durante unos 20 minutos una de las carreteras de acceso al polígono Paúles en el que se asienta la industria, en protesta por el plan presentado por el Grupo Ferroglobe al que pertenece, que contempla la paralización de tres de los cuatro hornos de la planta montisonense.

José Luis Alós, presidente del comité de empresa, explica que unos 80 trabajadores se han sumado este viernes por la mañana a la concentración en las puertas de la factoría, tras la que se han trasladado a una de las carreteras que da acceso al polígono industrial, donde han permanecido alrededor de 20 minutos cortando la entrada y salida de vehículos. "Los vehículos han parado y lo han entendido", ha comentado Alós en relación al corte del tráfico.

Los trabajadores concentrados han mostrado dos pancartas con los lemas "Ferrobloge, tu traición la paga Monzón" y "No al cierre de hornos. Por el futuro y el empleo en Ferroatlántica del Cinca".

El calendario de movilizaciones diseñado por el comité de empresa prosigue este sábado, con una concentración en la plaza Mayor de Monzón, a las 11 horas, para que la situación que vive la factoría se visibilice en la ciudad. Desde el comité se invita a "todos los que nos quieran apoyar" a acudir al acto.

Las próximas concentraciones serán el jueves 5 noviembre en la puerta de la fábrica; el viernes 6 noviembre también en la entrada de factoría y el sábado 7 noviembre. en la plaza Mayor Monzón.

José Luis Alós ha señalado que, desde que a principios de octubre Ferroglobe presentó su plan estratégico, no han vuelto a tener más noticias de la dirección del grupo. "Estamos a la espera de que vengan y comunique oficialmente su planes", ha dicho el presidente del comité de empresa que, ha abundado en que "si nos cierran tres de los cuatro hornos, el empleo que quede va a ser el que sea" y "con ese nivel de producción, la factoría va a estar tan debilitada que no va a tener ningún sentido".

Ha añadido que además de rechazar frontalmente el cierre de hornos, reclaman que se invierta más para "potenciar" la fábrica, tras la venta de los saltos hidroeléctricos.

"Nuestro miedo es que con este planteamiento sea el final de la fábrica", ha concluido Alós.