Jacetania

JACETANIA - VUELO SIN MOTOR

Un joven de 17 años recorre más de 500 kilómetros en un vuelo sin motor

El belsetano Nacho Burgos vuela a vela desde Santa Cilia hasta el Val d"Aran

Un joven de 17 años recorre más de 500 kilómetros en un vuelo sin motor
Un joven de 17 años recorre más de 500 kilómetros en un vuelo sin motor
S.E.

Nacho Burgos comenzó a volar con 14 años, la mínima edad permitida para ello, en el aeroclub de Luchon (Francia) y fue en aquel momento el piloto más joven de España y Francia. Ahora tiene 17 años, y este belsetano residente en Bagnères de Luchon, es ya piloto de vuelo a vela. Este tipo de vuelo sin motor se basa en la capacidad de mantenerse volando en un planeador, aprovechando la aerodinámica del avión y las corrientes ascendentes de aire que se generan en la atmósfera. Como los veleros no tienen motor, deben ser remolcados por una avioneta hasta una cierta altura, normalmente unos 500 metros. A partir de ese momento el velero queda libre.

Durante estos días, el piloto Ignacio Burgos ha visitado el aeródromo de Santa Cilia para volar con los planeadores del aeroclub Nimbus, donde ha llegado a acumular más de 500 kilómetros en un solo vuelo. Al mando del DG200, Burgos ha volado desde Santa Cilia hasta el Port de la Bonaigua en el Val d"Aran, recorriendo en el mismo vuelo ambas vertientes del Pirineo. Este es según Fly-Pir, empresa encargada de la gestión del aeródromo, "un ejemplo claro de que el vuelo sin motor es apto para cualquier edad y que supone además una alternativa para jóvenes en el aeródromo de Santa Cilia, donde se imparten cursos para obtener la licencia desde edades tempranas".

Esta no es la primera vez que Ignacio Burgos volaba con los aviones del club Nimbus. Durante uno de los stages que ha realizado el aeroclub de Luchon durante este año, ha volado utilizando los planeadores del Nimbus gracias a un acuerdo de colaboración interclubes que se está ultimando estos días. En el aeroclub de Luchon hay otros pilotos que quieren recorrer también la cara sur del Pirineo, por ello, según informa Fly-Pir, los aeroclubes de Luchon y el Aeroclub Nimbus (Santa Cilia) están valorando establecer un convenio de colaboración que permita a los pilotos de ambos clubes volar en condición de socios en ambos aeródromos. Este espíritu de cooperación que se inició hace más de 15 años gracias a unos proyectos de cooperación transfronteriza (Interreg), pretende ahora reforzarse estableciendo lazos de unión más fuerte que permitirán unir ambas vertientes del Pirineo.

La Organización de Aviación Civil Internacional (Oaci) recomienda que el inicio de cualquier carrera profesional relacionada con el pilotaje de aeronaves empiece por el vuelo sin motor y de hecho, cada vez más líneas aéreas incluyen entre sus variables de selección de nuevos pilotos el tener conocimientos en esta materia. El vuelo a vela, dentro del ambiente asociativo de un aeroclub, indica Fly-Pir, implica inculcar en los jóvenes que sienten interés por los aviones una primera toma de contacto con el mundo de la aeronáutica, dentro de un ambiente de colaboración y asociacionismo.