Jacetania

JACETANIA - PATRIMONIO

Desaparece el arco de la iglesia de Huértalo, en la Canal de Berdún

Las actividades continuarán con los Titiriteros de Binéfar el 30 y el 2 y 3 de enero en el Centro Cívico con Guirigay Plus

Desaparece el arco de la iglesia de Huértalo, en la Canal de Berdún
Desaparece el arco de la iglesia de Huértalo, en la Canal de Berdún
S.E.

JACA.- Los habitantes de la Canal de Berdún sienten desazón y una gran rabia, tras conocer la reciente desaparición del arco de la iglesia de San Esteban, situada en el núcleo rural de Huértalo, hoy despoblado. Se trataba de un elemento con valor emocional para los vecinos, porque la puerta del templo fue testigo de bodas, bautizos y funerales.

Otra de las pedanías de Berdún es Majones, una de cuyas vecinas, Beatriz Francisoud, corroboró este pasado domingo el expolio sufrido por el arco, que debió producirse en el último mes, convirtiéndose en el segundo ataque en pocos días contra el patrimonio de la Jacetania, tras el robo del fragmento de un capitel expuesto en el Monasterio de San Juan de la Peña.

La iglesia de Huértalo depende de la Diócesis de Jaca, desde la que se interpuso una denuncia ante la Guardia Civil, que abrirá la correspondiente investigación, según indicó el párroco de Berdún, Ramón Clavería, que tuvo que comprobar la desaparición del arco "in situ" y analizar personalmente diversos detalles antes de dar el paso legal.

El pasado verano vio la luz el libro titulado "Huértalo, el pueblo que fue" cuyo autor, el oscense Cristian Laglera, comentó que "la iglesia -un inmueble de origen románico datable en el siglo XII- quizá es el edificio que se mantiene más digno, partiendo de la base de que está en ruinas".

De hecho, "el pueblo está devastado" y "de todas las viviendas, solo Casa Matías mantiene el tipo a duras penas", mientras que "el resto son una ruina absoluta". Hace algunos años (en 2014 o 2015), "también robaron el arco de acceso a la ermita de Huértalo", según recordó el escritor, que explicó que dicho edificio "sufrió el hurto de las dovelas de la puerta y de la pila benditera que tenía empotrada en el muro sur".

Por su ubicación, Huértalo resulta un tanto inaccesible, pero hace dos meses el pueblo no tenía zarzas, lo que facilitaba el acceso de los curiosos, un hecho que lamentan los antiguos vecinos, conscientes de haber perdido un pedacito de su historia.