Jacetania

JACETANIA - GANADERÍA EXTENSIVA

Claverina reaparece en Ansó y mata a una oveja

Antonio Casajús prevé "un verano complicado" y dice que "los ganaderos están desamparados"

Claverina reaparece en Ansó y mata a una oveja
Claverina reaparece en Ansó y mata a una oveja
S.E.

JACA.- La Jacetania vuelve a verse golpeada por la acción del oso, al que se atribuye un nuevo ataque con el resultado de una oveja muerta, cuyo cadáver fue encontrado el jueves en el puerto de Estiviellas, en Ansó, según confirmó ayer viernes el Gobierno de Aragón. La Patrulla Oso constató la presencia de huellas en la zona. Por su tamaño y el entorno, se podría tratar de Claverina, una de las osas eslovenas reintroducidas por el Gobierno francés.

El testimonio de los agentes de la Patrulla Oso constata la presencia de huellas en las inmediaciones de la zona donde apareció la oveja muerta. Por el tamaño de las huellas y la zona, creen que podría tratarse de Claverina, una de las osas eslovenas que forman parte del plan de reintroducción promovido en el Pirineo por el Gobierno francés.

La oveja afectada pertenece a un rebaño de 1.500 cabezas que es propiedad del cheso Antonio Casajús y su hijo, Luis, y otro ganadero de Embún. El rebaño pasa el invierno en los Monegros y acababa de volver, por lo que este incidente "es un jarro de agua fría", según Antonio. Al subir al monte, el cheso encontró la oveja y "los buitres se la estaban comiendo". Esta vez, "la osa se conformó con matar una para no enfrentarse a los cuatro perros, pero es un animal que está decidido a comer carne". Además, "la cuadrilla del oso dice que es posible que vuelva a atacar en dos o tres días".

Según Antonio, el ataque se produjo a las ocho o nueve de la tarde del miércoles, "en una zona donde no hay pistas, ni corrales, ni refugios". En este sentido, lamenta "la poca voluntad de la administración para poner pistas". "Entre eso y el coronavirus, estamos desamparados", denunció.

La familia Casajús prevé "un verano complicado". Su idea es reforzar el ganado con vallas eléctricas, que podrían estar listas la próxima semana. Aun así, "hay que estar cerca de las ovejas, no las podemos dejar solas, por lo que habrá que decir adiós a la familia hasta octubre", declaró Antonio.

Para el cheso, "el Gobierno de Aragón debe ponerse de acuerdo con los franceses o ir a Bruselas y reclamar que Francia pague los daños causados por las osas y sus descendientes, y todas las infraestructuras que hagan falta". Su hijo "tenía ganas de aumentar y mejorar el rebaño". "Creo que esto frenará sus intenciones", señaló.

Dentro de lo malo, "esto fue un ataque mínimo, pero tenemos el miedo de que nos coja a las ovejas en un barranco y el desastre sea mucho más grave", advierte. Otro ganadero, Javier Laplaza, de Siresa, ya sufrió la muerte o desaparición de media docena de cabras esta primavera en varios ataques atribuidos a Claverina. El último sucedió hace quince días.

Otro ganadero de Siresa, Javier Laplaza, sufrió la muerte o desaparición de media docena de cabras entre los meses de mayo y junio, a raíz de varios ataques que también se atribuyen a Claverina.