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COSAS DE CASA

Murillo vuelve a lucir su Virgen de La Liena

La talla románica va a salir en procesión el próximo domingo, tras ser restaurada en Jaca

Autoridades, la restauradora, vecinos de Murillo y el párroco, junto a la obra restaurada.
Autoridades, la restauradora, vecinos de Murillo y el párroco, junto a la obra restaurada.
Ricardo Grasa

El Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón –a través de la dirección general de Patrimonio Cultural– financió la restauración de la talla románica de la Virgen de la Liena, de Murillo de Gállego, un municipio zaragozano situado en la comarca de la Hoya de Huesca. Esta obra es una representación de la Virgen con el Niño de finales del siglo XII o principios del XIII, procedente de la iglesia dedicada a la Virgen de la Liena.

La directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Marisancho Menjón, asistió recientemente a la presentación de la restauración de esta talla, que está declarada Bien Inventariado del Patrimonio Cultural Aragonés y cuya mejora se llevó a cabo en el Museo Diocesano de Jaca, donde se expuso hasta este pasado viernes. Los trabajos de restauración costaron 4.000 euros y duraron dos meses.

En principio, estaba previsto que este sábado -28 de enero-  la imagen volviera a la parroquia de Murillo de Gállego, desde donde saldrá en procesión el próximo domingo, día 5 de febrero, al ser el fin de semana más próximo al día 2 de febrero (festividad de la Virgen de la Candelaria). De este modo, la pieza regresa al lugar donde adquiere todo su sentido devocional y cultural.

Teniendo en cuenta la protección cultural, el interés histórico-artístico y el deficiente estado de conservación, las actuaciones realizadas por la restauradora de arte jaquesa Inmaculada Piedrafita implicaron una serie de intervenciones. En primer lugar, se realizó una limpieza química gradual y selectiva de la superficie pictórica, dorados y policromías, tras las pertinentes catas y pruebas de solubilidad. También se procedió a la eliminación puntual de repolicromías y repintes en deficiente estado de conservación, recuperando la policromía subyacente.

La Virgen de La Liena, en el Museo Diocesano de Jaca.
La Virgen de La Liena, en el Museo Diocesano de Jaca.
Ricardo Grasa

Por otro lado, se han estabilizado policromías en peligro de desprendimiento, devolviendo la cohesión y adhesión al estrato pictórico mediante la consolidación y el sentado de policromías y preparación. Por último, se ha ejecutado una reintegración cromática de lagunas y pequeñas pérdidas, previamente estucadas y siguiendo el criterio de discernibilidad, y se ha aplicado una capa de protección final del conjunto escultórico.

Antes de la intervención, el conjunto escultórico presentaba una repolicromía generalizada en las dos figuras, tanto en la propia Virgen, que viste velo, manto y túnica dorados con pliegues muy verticales que acentúan su esbeltez, como en el Niño, que también viste una túnica dorada bajo la que se han detectado restos de una policromía subyacente de color rojizo.

La talla está realizada en madera y su estado de conservación era deficiente. Presentaba suciedad superficial y pequeñas fisuras y grietas tanto en el soporte lígneo como en la policromía, que además de tener un fuerte ennegrecimiento de los barnices aplicados sucesivamente, aparecía descohesionada debido al mal estado del aparejo o capa de preparación de la misma, lo que había provocado levantamientos y pérdidas puntuales. Todo ello sumado al repinte generalizado de las carnaciones y a puntuales desgastes por la manipulación durante su traslado en procesión, así como la pérdida volumétrica de un dedo de la mano izquierda del Niño.

Estilo iconográfico

La de la Liena es una Virgen en Majestad sedente, del tipo Sedes Sapientiae o Trono de Sabiduría, expresión latina recogida en las letanías laurentianas para hacer referencia a este tipo de Theotokos o Madre de Dios representada como trono de la divinidad, de su Hijo. En este caso, el niño Jesús aparece sentado sobre su rodilla izquierda, rompiendo el eje de simetría habitual en las primeras representaciones románicas de la iconografía mariana.

Ambas figuras se representan coronadas, frontales y hieráticas, sin apenas expresión en sus rostros ni comunicación entre ellas, aunque destaca la pronunciada elevación de la mano derecha de la Virgen, en la que sostiene la esfera representativa de la grandeza y el poder de ambos personajes. También llaman la atención las manos del Niño, quien con la derecha esboza el gesto de bendecir y con la izquierda sostiene un delicado pajarillo.

La iglesia de la Virgen de La Liena es una interesante construcción medieval situada en la parte más alta de Murillo de Gállego. A pesar de sus numerosas transformaciones, conserva destacados elementos como una ventana geminada con doble arco de herradura, un largo pórtico en su lado meridional, un excepcional pavimento enmorillado en el interior y un singular conjunto de pintura mural trasladado a lienzo en la cabecera.

Por razones de conservación y seguridad, la talla está depositada en la iglesia parroquial del Salvador de la localidad, templo desde el que sale todos los años en procesión hacia la iglesia y que está declarado Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, desde 1946.