Aísa se acerca al turismo del País Vasco y Navarra
La Diputación Provincial de Huesca va a invertir un millón de euros en conectar el valle con la A-21
Los vecinos del valle de Aísa y los pueblos de La Solana de Jaca podrán transitar con seguridad y acortar notablemente las distancias con la A-21. Todo ello gracias a un proyecto de la Diputación Provincial de Huesca (DPH) que impulsará el acondicionamiento del camino existente entre la N-240 y A-2605 (Ascara-Las Tiesas), convirtiéndolo en una nueva carretera que dará servicio a todo este valle situado en la Jacetania.
El diputado responsable del departamento de Obras Públicas de la DPH, Joaquín Monesma, subrayó que “esta actuación no beneficia únicamente a la zona, sino que se trata de un eje de interés provincial”, teniendo en cuenta además que “el valle de Aísa no es de los más conocidos” y “podrá ponerse en el mapa en su conexión con la autovía”.
Tanto Aísa, como sus pedanías -Esposa y Sinués- llevaban mucho tiempo reclamando esta mejora, considerando fundamental contar con un acceso directo a la A-21. El tramo que se va a renovar totalmente es de unos 5 kilómetros y cuenta con un presupuesto de 1.545.292,23 euros. La inversión se va a distribuir en dos anualidades, con una primera partida de 500.000 euros en 2023, dejando el resto del montante para 2024. El plazo de ejecución que calcula la DPH es de nueve meses. Se estima que las obras de acondicionamiento de la nueva carretera podrían iniciarse durante la segunda mitad del presente año, ya que, una vez que se liciten los trabajos, se adjudicarán a una empresa y se acelerará el proceso de construcción, superados los correspondientes trámites administrativos.
“Salida natural”
Una vez actualizado y definido el proyecto, están a punto de salir a licitación las obras de la carretera que une Ascara y el valle de Aísa por la que es su “salida natural”, como la define el alcalde de Aísa, José Luis Galindo, subrayando que “transitar esta vía en buenas condiciones es una buena noticia” y además “permitirá acortar en al menos 15 minutos la conexión con la A-21, sin tener que llegar obligatoriamente hasta el casco urbano de Jaca”.
La intervención planificada por la Diputación Provincial de Huesca puede llegar a marcar un antes y un después en el valle de Aísa, siendo una baza interesante para el turismo, que “es un sector muy importante” para todo el entorno. Esta nueva vía “logrará acercarnos al País Vasco y a Navarra” e incluso, “lógicamente a Zaragoza, cuando esté terminada la autovía”, en concreto, el tramo de la variante de Jaca.
José Luis Galindo, que no se presenta a la reelección y pondrá el punto final a un largo mandato al frente del Ayuntamiento de Aísa, dijo que “llevaban muchos años detrás de esta obra” y “al final, gracias a la Diputación Provincial y sobre todo, a su presidente, Miguel Gracia, va a ser una realidad el hecho de estar conectados con la autovía”.
La convicción de la DPH y el Consistorio es que la nueva carretera, que partirá de la rotonda de Ascara y llegará a la zona de Las Tiesas Bajas, “va a beneficiar tanto al valle de Aísa, como a los pueblos de La Solana de Jaca”, sabiendo que “la A-2605 no tiene entrada a la autovía”. Aparte, “todo el tráfico pesado que viene a estos pueblos y al valle de Aísa no va a necesitar pasar por Jaca” y “eso va a ser una ventaja” para la capital comarcal.
Con respecto al resto de carreteras del entorno, hay que destacar que “la que llega de Borau la mantiene la DPH y es estrecha, pero está muy bien”, según explicó el primer edil, que considera que “el problema que tenemos ahora es desde Las Tiesas Bajas hasta el desvío de Sinués”, un tramo que es del Gobierno de Aragón. “Allí, habría que ensanchar la carretera y arreglarla, porque está muy mal de suelo”, afirmó.
Beneficios para la economía local
El turismo deportivo y de naturaleza encuentran un espacio privilegiado en el valle de Aísa, en cuyo extenso término municipal se ubican la estación de esquí de Candanchú y una parte del Parque Natural de los Valles Occidentales. Los visitantes tienen la oportunidad de practicar esquí alpino y de fondo, montañismo, senderismo o bicicleta de montaña en sus escenarios naturales. Para dar cabida a la creciente demanda turística en la zona (concentrada especialmente durante los meses de invierno y verano), en el municipio se pusieron en marcha una serie de negocios como el Albergue Valle de Aísa, la Borda Juan Ramón, el Hostal Igüer o la Casa Rural Estarrún, que aparecen señalizados en la misma cuesta de entrada, a cuyos pies se levantó un espacioso aparcamiento.
Juan Ramón Calvo, responsable del Albergue Valle de Aísa, comentó que la obra proyectada por la Diputación Provincial “mejorará la conexión con la cabecera comarcal, porque los turistas tardarán 15 menos en llegar desde Jaca”, aunque considera que también es necesario adecuar la conexión con Hecho y Ansó, que son los pueblos “más turísticos” de los valles occidentales.
En este sentido, el empresario local aboga por intervenir en la carretera que une Aísa con Jasa, recordando que en ocasiones durante el invierno se encuentra “impresentable”, al “haber zonas de sombras que generan placas de hielo”. Del mismo modo, cree que se debería ampliar la extensión del tramo de Borau a Aísa, al existir diversas zonas en las que “no caben dos coches”.
Tanto la agricultura y la ganadería de ovino y vacuno, como el aprovechamiento forestal han sido otros de los sectores destacados de la economía del valle de Aísa, que puede presumir de ofrecer una serie de productos autóctonos y de calidad. Entre ellos, sobresale especialmente la Ternera del Valle de Aísa, que cuenta con una tienda on line y una tienda física en Jaca. Por ambas vías se ponen a la venta las especialidades creadas a partir de las reses que pastan en los montes de Aísa.
Inma Lafita, promotora de la Ternera del Valle de Aísa, dijo, con respecto a la inversión planificada desde la DPH, que “esta carretera tendría que estar arreglada porque acorta mucho las distancias entre el valle de Aísa y Jaca”, y animó a las distintas instituciones competentes a mejorar las comunicaciones para favorecer la llegada de los visitantes y la calidad de vida de los propios vecinos.“Me parece una maravilla que se haga esa carretera, que al valle de Aísa nos viene bien, ya que nos comunica muy bien con la A-21”, apuntó la empresaria, que vive en el municipio de Aísa y aboga por seguir invirtiendo en esta zona, ya que “desde Las Tiesas a Jaca la carretera no es buena”.
“Solidaridad” desde Ascara
La nueva inversión que plantea la Diputación Provincial de Huesca para las dos próximas anualidades “es un gran avance para el valle de Aísa” y del mismo modo “puede llegar a ser una solución para alguno de los pueblos de La Solana de Jaca”, tal y como indicó Fran Aísa, que es diputado provincial, además del propio alcalde pedáneo de Ascara. En el caso concreto del núcleo rural, explicó que “ya está muy bien comunicado”, teniendo en cuenta la proximidad con la autovía A-21
.“En Ascara hemos sido solidarios una vez más con los valles vecinos”, continuó el también concejal del Ayuntamiento de Jaca, haciendo hincapié en “el alto valor y el rendimiento agrario y productivo” que presentan los campos de la pedanía jaquesa, en los que se viene desarrollando el proyecto ecosocial ‘Cielos de Ascara’, que emplea la agricultura ecológica para favorecer la inserción laboral de personas que sufren discapacidad intelectual o que se encuentran en riesgo de exclusión.
Fran Aísa considera importante que “la nueva carretera del valle de Aísa tiene que ir de la mano de la ejecución final de la variante de Jaca”, que viene a unir la A-21 (Autovía del Pirineo entre Pamplona y Jaca) y la A-23 (Huesca-Jaca) y cuyas obras dependen del Gobierno central. La puesta en marcha de la variante sería de gran utilidad, como asegura el diputado provincial, a la hora de evitar las retenciones que registra la capital jacetana en sus accesos en temporada alta, especialmente durante los meses de verano.
