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TURISMO

Aragoneses propone retomar las excavaciones en San Juan de la Peña

La formación emplaza al Gobierno de Aragón a analizar el subsuelo del monasterio viejo

José Manuel de Prada, José Luis Solano y Lucía Guillén, en el Ayuntamiento de Jaca.
José Manuel de Prada, José Luis Solano y Lucía Guillén, en el Ayuntamiento de Jaca.
R. G.

El grupo de Aragoneses en el Ayuntamiento de Jaca quiere instar al Gobierno de Aragón a continuar las excavaciones arqueológicas realizadas en el Monasterio Viejo de San Juan de la Peña, cuyas últimas campañas datan de hace 40 años, pese a la constancia de los especialistas de que puede haber un valioso patrimonio oculto y enterrado en el entorno.

Tanto los concejales de Aragoneses, Lucía Guillén y José Manuel Prada, como José Luis Solano, el que fuera guarda del monasterio durante cuatro décadas, han dado a conocer este miércoles la iniciativa, que se llevará al pleno municipal.

“Hay indicios de que existe un patrimonio muy importante que sigue sin conocerse y vamos a proponer al Gobierno de Aragón que realice todas las acciones de investigación, documentación y catalogación de los restos del subsuelo del monasterio”, ha avanzado la concejala de Turismo, Lucía Guillén, convencida de que la propuesta “puede ser muy relevante” a nivel económico y cultural.

Su impresión es que los nuevos hallazgos “serían buenos para poner en valor esta parte de la historia, que es tan importante y nos hace ser un referente”. Además, estos hipotéticos descubrimientos “pueden beneficiar la actividad económica”, impulsando el flujo de visitas a San Juan de la Peña, hasta donde acuden 100.000 personas al año.

Para José Luis Solano, queda mucho por descubrir en San Juan de la Peña, que “es Paisaje Protegido”, por lo que “hay un problema de intereses” si se excava el entorno. “La vegetación que vemos estaba ocupada por las construcciones del monasterio viejo”, ha explicado, aclarando que del proyecto original “faltan la hospedería, el hospital, estancias reales, el receptorio, la enfermería o granjas”.

“A nivel de carretera, en 1987 nos salió una ‘trompa’ de 2,3 metros. Se han bajado 4,5 metros y no se encontró el suelo de la habitación. Si hay una ‘trompa’ tiene que haber otras tres y un sistema de escaleras”, ha continuado, añadiendo que “debajo de la iglesia prerrománica, puede que tengamos algún tipo de construcción”. Cuando se hicieron excavaciones en la necrópolis medieval, en 1985-1986, se encontraron tres anillos de oro de 24 kilates y un dado de hueso.