El Castillo de Loarre espera 30.000 turistas este verano

El Castillo de Loarre espera que en estos meses de verano 30.000 turistas se adentren a conocer la historia que esconde esta obra románica. Roberto Orós, alcalde de Loarre, confía en que se alcancen cifras parecidas a las de años prepandemia, concretamente a las de 2018, cuando “los festivos coincidieron y la afluencia fue mayor”.

Las familias eligen este destino con tanta historia cultural por todo lo que lo rodea. Con la propia entrada al castillo, se puede ver la Colegiata de Bolea y la Iglesia de San Esteban. Por lo que, según Orós, “las familias permanecen en el territorio tres o cuatro días mejorando el turismo de la tierra”.

Además, el castillo ofrece actividades como “El mapa del tesoro” o la visita al Laboratorio Paleontológico donde se pueden ver los huevos de dinosaurios hallados en las excavaciones del año 2019.

La llegada de las audioguías a través de una app, “permite a los turistas que vienen poder liberarse del agobio de los grandes grupos”, explica Orós. Lo que da más libertad a los visitantes para poder detenerse en cada punto y conocer la historia de una forma más pausada.

Todas estas mejoras unidas a las labores de mantenimiento provocan que, a pesar de los más de 1.000 años de historia del castillo, este se encuentre muy bien conservado. Esto ha generado que no solo las personas de las comunidades limítrofes de Aragón se acerquen a visitarlo, sino que, muchos turistas centroeuropeos elijan este enclave. Además de estadounidenses, y también en menor medida, asiáticos, lo que hace que el Castillo de Loarre sea reconocido internacionalmente.

Sin embargo, la afluencia de turistas se ve en ocasiones interrumpida por la llegada de proyectos culturales como “La Abadesa” que obligó a cerrar al público el castillo durante los meses de baja afluencia pero que la aparición en la gran pantalla puede suponer una gran forma de promoción del mismo. Orós, no descarta que pudiera haber más actividades como conciertos a lo largo de este periodo estival ya que afirma estar en contacto continuo, lo que podría afectar a los turistas que pretendan visitar el castillo.

Independientemente de estos pequeños actos culturales, el hecho de que esté abierto todos los días estos meses de verano de 10:00 de la mañana hasta las 20:00 de la tarde es un aliciente que unido al precio de las entradas provoca que sea un destino elegido por las familias.