La Litera

COLABORAN: CAJA RURAL DE ARAGÓN Y DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE HUESCA

Maite Osés: "Cuando tienes arraigo, no solo importa la cuenta de resultados"

#CONTRALADESPOBLACIÓN 

Maite Osés.
Maite Osés.
S.E.

Nafosa es una empresa con raíces, y no solo porque se dedica a los forrajes, sino porque es una industria familiar fundada por el abuelo y con la que la tercera generación está llegando a los cinco continentes. Emplea a más de 100 personas de manera directa y cuentan con unos 350 colaboradores. “Nosotros invertimos en el territorio y necesitamos de otras muchas personas. Nuestros colaboradores, algunos son autónomos pero otros de empresa familiar, que también han apostado por quedarse en el territorio. Su compromiso igual que el nuestro es permanecer”, asegura Maite Osés, directora de compras y logística de la empresa, que junto a sus dos hermanos -en finanzas y en producción- continúan al frente del negocio familiar.

Todo comenzó hace 83 años en Peralta (Navarra), cuando su abuelo producía y comercializaba la alfalfa. Al ampliar extensión, se adentraron en Zaragoza y el valle del Ebro hasta llegar hacia Huesca. “Mi padre decidió dar el paso de la industralización y, además de modernizar la planta que teníamos en Peralta, que era puramente almacén, apostó por invertir en la compra de una deshidratadora aquí -primero en Binéfar y, al crecer, en Esplús-. Y ahí empezó todo”, indica Osés, vecina de La Litera. Después, aún han crecido en Pinsoro y en Monzón. Además, cuentan con dos plantas en Argentina. En conjunto, gestionan más de 40.000 hectáreas con una producción de 400.000 toneladas, que venden en 35 países de los cinco continentes.

Además, ahora han iniciado una nueva línea pionera. Con todo, “nuestro negocio principal es el forraje, pero como hay que complementar para hacer la rotación de cultivos, se nos hizo la propuesta de la remolacha y la aceptamos. Es un producto que nos sirve como rotación y lo vendemos a Azucarera”, indica Osés. Lo envían en tren desde la Terminal de Monzón (TIM) hasta la planta de Azucarera en Miranda de Ebro (Burgos), donde se transforma.

Planta de Nafosa en Esplús.
Planta de Nafosa en Esplús.
S.E.

Para todo ello, “nosotros tenemos que contar con empresas de aquí, para que puedan dar un servicio eficiente. Cuando hay plaga y hay que tratar, necesitamos que esté aquí. Ese servicio de proximidad es lo que hace que sea necesario contar con el personal de los pueblos de alrededor”, comenta Osés.

Hay empresas que vienen e invierten, pero si no tienen ese arraigo en la zona en la que producen o transforman en un momento determinado -permítame la expresión- levantan el campamento y se van. Si no te vincula nada, la cuenta de resultados es la que manda, pero si tienes un arraigo, no solo importa eso”, asegura. No obstante, lamenta la excesiva burocracia existente para las empresas familiares. “En este caso, el propio cultivo nos vincula, pero ese conocimiento imprescindible se tiene aquí, no es un modelo fácilmente transportable”, comenta Osés, enraizada también por su familia a La Litera.

Además, “en las empresas familiares, cuando es algo que heredas, que lo has visto hacer siempre y que lo vives como propio, es muy diferente. Tienes un apego a la familia y a la tierra. El gran cambio lo hizo mi padre pero nosotros también lo hemos tenido que mantener y en una situaclión mucho más cambiante”, indica Osés, dispuesta a seguir al frente de una empresa en expansión sin perder de vista el territorio.