Monegros

ECOS/ ¿qUIÉN SOY?

Nanón Paraled Santos, el ingenio del hermano de en medio

Pasó una infancia y adolescencia entre trastadas, estudio, lecturas y peñas y es actualmente presidente de la Asociación Casco Antiguo de Sariñena 

Nanón Paraled Santos en una imagen de niño y en la actualidad.
Nanón Paraled Santos en una imagen de niño y en la actualidad.
S.E.

Para muchos, ser el hermano del medio puede ser una tortura, pero si se mira desde otra perspectiva, en realidad sólo ha ayudado a ser el más genial porque, según algunos estudios, esos hermanos son increíbles.

Nanón Paraled Santos es el hermano de en medio, de casa Sabineta. “Creo -dice- que el mote viene de que mi bisabuelo tenía sabinas”, explica nuestro protagonista, rememorando su infancia.

“Tengo un hermano 3 años mayor y una hermana 3 años menor que yo, así que soy el del medio, la oveja negra o el más malo de los tres”, dice riendo el sariñenense.

Tiene muchas anécdotas en su memoria. “Con el maestro Don Alfonso, cuando nos daba nueve caramelos por acertar la tabla del 9, o nos hacía dar 9 vueltas a la clase cantando la tabla”, así como también recuerda sus juegos en el huerto Cavalero, “decían que había arenas movedizas, pero lo que sí había eran muchas zarzas, a las que una vez Antonio Pena me tiró; cuando llegué a casa, mi abuela me curó con mercromina, parecía un guerrero todo lleno de heridas rojas”.

Con sus amigos tenían una peña en casa Juan Guillén, “’Los Buenos’ la llamamos, y no es que fuéramos malos, pero de vez en cuando hacíamos trastadas muy sonadas, en alguna hasta intervino la Guardia Civil”, detalla Nanón, que en aquellos años era muy mal estudiante: “repetí un curso y cambié de compañeros y de peña, entonces ya fue ‘La Gaita’, en la que unas fiestas estábamos más de cien críos”.

Además de sus juegos tirándose piedras desde las canteras, el mediano de casa Sabineta también ocupaba su tiempo leyendo “las joyas literarias juveniles o la colección de once libros de Tarzán, que luego veía en el cine y no tenía nada que ver”, cuenta sobre el Cine Victoria, al que después de proyectar el Coloso en llamas, no volvió jamás, “me impresionó mucho una escena que salían de un ascensor todos quemados y no me acerqué nunca más al cine”.

Con la condición de hermano del medio, Nanón aprendía de las experiencias de sus hermanos, a la par que siempre era el independiente, el aventurero, el más simpático y con mejor humor del mundo, el más creativo a la hora de organizar panoramas puesto que con hermanos que eran o demasiado pequeños o demasiado mayores para jugar, desarrolló una imaginación impresionante. Ahora la usa para organizar los panoramas y fiestas más increíbles del mundo, así como de joven fue fundador de Radio Sariñena. “Estaba en el ayuntamiento y con Ana Lerín, Miguel Areste y David Tomás, poníamos música, dedicatorias que hacían por teléfono”, muchas cualidades con las que conquistó a su mujer, Luisa Casañola, con la que tiene dos hijos encantadores.

También fue agricultor. “La temprana muerte de mi padre y estando mis hermanos estudiando, unido a que no quería estudiar, hizo que tomará cargo de las tierras, que ahora tengo arrendadas, pues trabajo en una empresa”, y a los 40 años comenzó de nuevo a estudiar; “hice un post grado de electrónica, que es de lo que trabajo”.

En la actualidad es el presidente de la Asociación Casco Antiguo de Sariñena, “que ya llevamos varios años reivindicando diferentes actuaciones muy necesarias en esta zona, así como el desarrollo del plan del Área de Regeneración y Renovación Urbana (Arru), es necesaria una renovación de calles, edificios o de la red de aguas y es urgente, esperamos que el nuevo Ayuntamiento se ponga manos a la obra”, reivindica Nanón.