Monegros

fauna

El escribano pigmeo regresa a Huesca casi 30 años después

Acostumbrado a invernar en el sur de China, es el segundo avistamiento de un ejemplar en la provincia tras el acontecido en 1995

Ejemplar de escribano pigmeo avistado en la laguna de Sariñena el 26 de noviembre de 2023.
Ejemplar de escribano pigmeo avistado en la laguna de Sariñena el 26 de noviembre de 2023.
Luis Miguel Guerrero Pérez y Javier Martínez Arguis

Javier Carreras registró el 1 de noviembre del año 1995 un hito en la ornitología altoaragonesa tras avistar por primera vez en la provincia de Huesca un ejemplar de escribano pigmeo.

Esta especie, morador común en las regiones del sur de China, fue vista entonces en la laguna de Sariñena. Casi 30 años después, un equipo del Grupo Ornitológico Oscense (GOO) repitió esta hazaña el pasado 26 de noviembre.

Santiago Sancho y Nacho Arizón participaban en una jornada de anillamiento en el carrizal de la laguna en los Monegros. Ambos, anilladores expertos del GOO, lideraban un equipo formado por los fotógrafos Luis Miguel Guerrero y Javier Martínez, y los colaboradores Javier Vera, Eduardo Gracia, Pablo y Telmo. Desde hace años practican en el chapazal esta actividad dentro del programa de seguimiento de aves invernantes. Parecía un día corriente, pero pasaría a ser una cita para la historia.

La jornada transcurría triunfante, con un total de 57 capturas de diez especies, destacando 25 capturas de escribano palustre (Emberiza schoeniclus). Uno de ellos les llamaba poderosamente la atención. “Era un ejemplar joven que se dintinguía entre la bandada, toda una rareza en estas latitudes”, apunta Nacho Arizón, presidente del Grupo Ornitológico Oscense.

Desde el primer momento eran conscientes de la importancia de su captura. La captura de este ejemplar juvenil de escribano pigmeo se convirtió así en la segunda cita para la provincia de Huesca y la quinta para Aragón. Existe un avistamiento realizado en 1986 y una observación aún más antigua de esta especie, ambas sin homologar y realizadas precisamente en el mismo lugar, en la laguna de Sariñena.

Su viaje migratorio

El área de distribución del escribano pigmeo se encuentra en la tundra y se extiende desde el norte de Escandinavia hasta el Pacífico en la zona de Siberia, donde acostumbra a criar.

“Habitualmente pasan el invierno en el sur de China y es extraño verlos en un hábitat palustre, así que creemos que su captura puede deberse a un vínculo en el viaje con los escribanos palustres para emprender nueva ruta migratoria”, explica Nacho Arizón.

Desde el GOO argumentan que se sumó a ellos en el centro de Europa fundando un bando mixto. Al ser joven y vivir una de sus primeras migraciones, pueden aventurarse en estas empresas. De hecho, se han dado más citas este otoño en Andalucía y en Murcia.

No es la primera vez que se advierte un bando mixto en la provincia. Hace unos años se descubrió un ejemplar de ganso careto (Anser albifrons) que viajaba con grullas y lo localizaron en Extremadura, Gallocanta y Sotonera. “Continúan la migración con ellos y, pasado un año, se juntan con los de su especie”, apunta Arizón.

“El escribano palustre es una especie en regresión, sin embargo, el escribano pigmeo cada vez es más habitual. Esperamos que esta pequeña ave, que ahora lleva una anilla que le identifica, siga felizmente su largo viaje y quién sabe si en otra ocasión tendremos noticias de él (ella)”, celebran desde el Grupo Ornitológico Oscense por este nuevo vecino en la provincia.