Monegros

CONTRA LA DESPOBLACIÓN

"Tejiendo Sororidad", de Los Monegros, premio Menina 2023 de la Delegación del Gobierno en Aragón

Impulsado desde Servicios Sociales, busca sensibilizar sobre la violencia de género

Integrantes de Tejiendo Sorodidad, en la entrega del premio Meninas.
Integrantes de Tejiendo Sorodidad, en la entrega del premio Meninas.
S.E.

“Tejiendo Sororidad”, de Servicios Sociales de la Comarca de Los Monegros, ha recibido uno de los “Reconocimientos Meninas” que otorga la Delegación de Gobierno en Aragón por su lucha contra la violencia hacia las mujeres. La trabajadora social Elena Planas y la psicóloga Encarna Palma, ambas del equipo del Centro Comarcal de Servicios Sociales, recogieron el premio de manos del subdelegado del Gobierno en Huesca, Carlos Campo, en un acto presidido por el delegado del Gobierno en Aragón, Fernando Beltrán, y celebrado el pasado mes en Zaragoza, que contó con el presidente de Los Monegros, Pedro Loscertales; la vicepresidenta, Carmen Soto; la consejera de Servicios Sociales, Ana Puey; y la directora del centro, Chus Zapater.

El proyecto, pionero en Los Monegros, consta de dos fases: formativa y de voluntariado. “En la primera, se imparte formación a un grupo de ocho mujeres de Los Monegros, algunas de ellas supervivientes de violencia de género, sobre las causas y consecuencias de esta problemática, así como sobre las herramientas para afrontarla y superarla. En la segunda fase, se prevé que estas mujeres se incorporen como voluntarias en el protocolo de intervención comarcal en violencia de género, donde podrán ofrecer su experiencia y apoyo a otras mujeres que están sufriendo esta situación”, explican Planas y Palma. “El objetivo es sensibilizar sobre la violencia de género y empoderar a las mujeres que la padecen, creando una red de sororidad y solidaridad entre ellas. Además, tiene un fin terapéutico para las participantes, ya que les permite reconocerse, valorarse y mirar hacia el futuro con esperanza”.

“Tejiendo Sororidad” es un ejemplo de cómo las mujeres que han vivido la violencia de género pueden ayudar a otras, creando una red de apoyo y acompañamiento que favorezca su recuperación y su autonomía. “Es una forma de trabajar por la igualdad, para terminar con la violencia de género desde la propia experiencia y la empatía de las mujeres y demás personas sensibilizadas”, apuntan Elena Planas (trabajadora social), Elena Sánchez (educadora social) y Encarna Palma (psicóloga), tres mujeres que impulsan el proyecto.

Así, las trabajadoras sociales proponen a las posibles participantes. “Psicóloga y trabajadora social definen los objetivos, actividades y recursos y se reparten las tareas durante el año: charlas para la población general, cursos para profesionales, formación para víctimas, sesiones semanales del grupo re-conectar, taller de teatro terapéutico, difusión en redes sociales, así como colaboraciones puntuales con otros profesionales e instituciones”, indican.

El proceso de pasar de víctima a agente activo es “cuando se produce la ruptura física con el agresor y comienza el proceso de recuperación de su identidad. Pasa por una serie de fases en las que se hace más fuerte, puede elaborar el relato de lo vivido y, desde la aceptación de lo ocurrido, verbaliza la necesidad de ayudar a otras víctimas para evitarles parte de las dificultades que ha vivido ella”, apuntan. Y destacan que “hacerse visible como superviviente es un ejemplo de superación que las incluye y las identifica como agentes sociales activos en el compromiso por una sociedad más igualitaria”.