Monegros

SUPLEMENTO AGROALIMENTARIO

Miel natural, auténtica y artesana bajo el sello “Castillo de Monegros”

En sus colmenas se recogen los néctares de floraciones, principalmente de romero y tomillo, con una calidad excepcional en un entorno privilegiado

Colmenar donde se produce la Miel ‘Castillo de Monegros’.
Colmenar donde se produce la Miel ‘Castillo de Monegros’.
M. B.

Francisco Escuer, su esposa María Pilar Otal y su hijo mayor, Sergio, que se ha incorporado a la empresa familiar, llevan más de veinte años dedicados y especializados en la apicultura de Miel Castillo de Monegros en el municipio de Castejón de Monegros.

“Somos de Castejón de Monegros y vivimos cien por cien del campo, compaginamos la agricultura con la apicultura”, explican los avicultores que de manera casual, dice Francisco, se encontró con el mundo de las abejas, “al principio fue un hobby, hasta que más tarde dejé mi trabajo por cuenta ajena para dedicarme a mis abejas y al campo”.

Un proyecto que produce miel de calidad y la comercializa, “que es lo más difícil”. “La inspiración llegó porque tenemos uno de los mejores romerales de España y decidimos lanzarnos haciendo nuestra nave industrial para la extracción y envasado de este maravilloso producto”.

En sus colmenas se recogen los néctares de floraciones, principalmente de Romero y Tomillo, con una calidad excelente gracias a las características específicas del entorno. Localizados a 500 metros de altitud, las escasas lluvias convierten sus productos en artículos exclusivos.

Fieles a las tradiciones, realizan todo el proceso de recolección, extracción, tratamiento y envasado de la miel de sus colmenas, en instalaciones propias de forma artesanal para ofrecer miel natural y auténtica bajo la marca Miel “Castillo de Monegros”.

“Nos dedicamos a esta actividad, heredada de los árabes, con la vocación de ofrecer a nuestros clientes un abanico de productos de excelente calidad y con todas las propiedades beneficiosas, saludables y deliciosas”.

De hecho, trabajan con varios tipos de miel, la de romero, de color claro, aroma suave y cristalización intensa, que se cosecha en primavera; la miel de mil flores, de color ámbar oscuro, según la flora y aroma floral, su cosecha es en verano; o la miel de tomillo, que es una miel que puede variar el color, pudiendo ser ser más o menos clara, hasta más o menos roja.

Además de las mieles de romero, tomillo o mil flores, ofrecen varias líneas de productos como detalles de miel para eventos: bodas, comuniones, bautizos y otros, y la venta de enjambres.

Miel Castillo de Monegros, al mismo tiempo que aporta a la mesa la exquisitez de la miel monegrina, es una actividad que va más allá de lo puramente económico.

Además de generar ingresos, contribuye en beneficios significativos al territorio y al medio ambiente, como son la polinización, puesto que las abejas son importantes polinizadores. “La apicultura es una actividad valiosa que beneficia tanto al medio ambiente como a las comunidades locales. Su papel en la polinización y la conservación de ecosistemas es esencial para un futuro sostenible”, destaca el apicultor.

Respecto a la dificultad de comprar miel de romero, explica que “el romero es una planta que necesita muy pocas lluvias para florecer, pero llevamos dos años de extrema sequía que está dificultando que la planta se desarrolle como debería, por lo que las floraciones casi son nulas. Este año parece que la cosa pinta algo mejor”.

Por último, Escuer reivindica apoyo para este sector: “Hay que hacer visible la importancia del trabajo que realizan las abejas, el cuál pasa muchas veces desapercibido”.