Sobrarbe

#soydelaltoaragon - boltaña

Ariane Montals: "No tuve ninguna duda en aceptar el reto de dirigir el hotel"

Está al frente del Monasterio de Boltaña desde hace poco más de un mes

Ariane Montals llegó a Sobrarbe el pasado 6 de noviembre para dirigir el Hotel Barceló Monasterio de Boltaña.
Ariane Montals llegó a Sobrarbe el pasado 6 de noviembre para dirigir el Hotel Barceló Monasterio de Boltaña.
S. E.

Cuando a Ariane Montals le surgió la posibilidad de ponerse al frente de la dirección del Hotel Barceló Monasterio de Boltaña no se lo pensó ni un segundo. En ese momento, trabajaba en Madrid de analista de operaciones en la misma cadena hotelera y -reconoce- “quería volver a hoteles”. 

Natural de Alicante y “criada” en Madrid, Ariane Montals explica que por su trabajo “había estado en el Barceló Monasterio de Boltaña, así que (cuando se presentó la oportunidad) fui voluntaria y aceptaron mi candidatura para dirigir el hotel”. Su nueva etapa profesional le trajo a Boltaña, donde desembarcó el pasado 6 de noviembre, con el reto de dirigir un hotel emblemático no solo en Boltaña, ya que se trata de un antiguo monasterio del siglo XVII totalmente renovado como hotel de cinco estrellas y situado a los pies de otro emblema de Aragón: el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

“No tuve ninguna duda en aceptar el reto”, afirma, atraída por la singularidad y categoría del edificio, que le confieren una “casuística” que le enganchó. 

En el escaso mes y medio que lleva como directora del Monasterio de Boltaña está centrando sus esfuerzos “en conseguir una plantilla (de trabajadores) estable” y sobre todo con gente del territorio. 

“Al final, para que el proyecto funcione es importante tener un equipo sólido, que tenga miras a futuro de quedarse en la zona”, apunta Ariane Montals, quien reconoce que hay dificultades para lograr una plantilla estable” en un sector con temporadas altas y bajas, y picos en la afluencia de clientes. 

“Vamos a intentar buscar a gente de la zona; que la base del equipo sean personas que se quiera quedar” para evitar que se vayan cuando finalice la temporada alta. Tras un cierre programado en enero y febrero para reformar el spa, el hotel reabrirá el 1 de marzo y lo quiere hacer con un equipo sólido