Grupo Vino Tinto, un complejo "olímpico" tras una gran inversión en Adahuesca

BARBASTRO.- María Reyes Maza está entre las emprendedoras altoaragonesas que han apostado por el territorio, en este caso por su pueblo, Adahuesca, donde ha desarrollado el complejo hotelero Grupo Vino Tinto con una inversión de un millón de euros entre dos fases realizadas en los años 2008 y 2016. En la práctica, de tres casas ruinosas pasó al complejo que se ha convertido en referencia nacional e internacional. Reyes trabaja en Madrid hace 25 años en rehabilitación de casas y edificios pero deriva inversiones a su pueblo. Figura entre las emprendedoras que ha participado en otras iniciativas y disfruta de mucha solvencia según fuentes consultadas.

El complejo consta del restaurante El Tomate Rosa, 14 apartamentos de lujo, organización de eventos, secciones de aventura, barranquismo y rutas en 4x4 por la Sierra de Guara. El novedoso programa Detox, basado en "escapadas saludables", productos ecológicos y caldos diuréticos completa la propuesta para una amplia clientela diversificada entre la que destaca el turismo francés y el nacional en menor porcentaje.

La inversión para ejecutar el proyecto ha sido de un millón de euros entre dos fases, con recursos propios -mayoría- y subvención del Ceder Somontano para ampliación del restaurante. La puesta en marcha ha llevado consigo la creación de 8 puestos de trabajo entre directos e indirectos, según explica Reyes. La iniciativa de llevar a cabo este complejo se debe al arraigo de generaciones familiares en la localidad. "Un día mi abuela me dijo, con mucha gracia, que rehabilitaba muchas casas y edificios en Madrid. Sin embargo, la casa del pueblo estaba muy vieja y deteriorada".

Reconoce que "mi abuela tenía razón y me abrió los ojos. Además, todos somos de la tierra porque mi padre es de Jaca, trabajó en Monzón y al final vivimos en Adahuesca. Mis abuelos regentaron el Mesón de Sevil, que lleva consigo una historia personal curiosa. Así que no tuve dudas en sacar adelante este proyecto, hasta ahora con buenos resultados y rentabilidad. En este sentido, he contribuido al desarrollo de Adahuesca y de la zona de influencia en el Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara".

La ubicación a los pies de Guara y cerca de Alquézar ha sido "clave esencial" para el desarrollo del proyecto. "Estamos en un lugar perfecto para relajarse, prácticas de senderismo, excursiones a lugares próximos, pueblos deshabitados, ermitas y visitas a viñedos. En definitiva, idílico para disfrutar de la naturaleza, de la gastronomía y de la vida".

En la propuesta del restaurante, "el Tomate Rosa de Barbastro está entre las especialidades con carnes a la brasa, verduras y cardos del huerto, destacan los quesos de Radiquero, elaborados en Adahuesca, longaniza de Graus y deliciosas raclettes de queso y carne. Apostamos por aceites vírgenes, en especial el Alquezrana, disponemos de variedad de setas de temporada y trufa negra que se recoge en la zona con perros adiestrados".

El programa Detox está entre las últimas novedades. "Consiste en escapadas saludables a base de licuados depurativos y caldos diuréticos, productos ecológicos de las huertas de Adahuesca y del Somontano. Los programas se enfocan a la salud, dietas para deportistas y público en general, ayunos intermitentes depurativos para continuar un estilo de vida saludable. Se trata de revitalizar el organismo para mejorar la salud y problemas crónicos como colesterol, diabetes, obesidad y presión elevada", explica.

La práctica de estas actividades saludables está en "buenas manos porque contamos con guías para paseos en la naturaleza por ermitas y viñedos, terapias de mindfullnes, hatha yoga, masajes, baños de vinoterapia y médico profesional durante la estancia". Hasta ahora, "el turismo de salud tiene buena aceptación, en especial durante los fines de semana". Por otra parte, el complejo disfruta de buen cartel entre la clientela francesa con cerca del 90% de las reservas.