Somontano prevé una caída de la producción de oliva de 62.000 kilos

La campaña olivarera 2022/23 se ha iniciado en las almazaras del Somontano con previsiones de producción muy bajas hasta el extremo de que será la peor cosecha desde 2010, incluso con antelación. Las expectativas están en consonancia con el sector oleícola nacional donde la preocupación e incertidumbre son notables entre productores, industriales y operadores por el incremento de costes y menor producción de aceite de oliva. Las cifras estimadas entre siete almazaras del Somontano son de 1.355.000 kgs en los inicios con descenso de 62.000 kgs respecto al final de la campaña anterior.

La climatología afectó mucho por las heladas de abril y el excesivo calor en mayo, si bien la cosecha es muy baja en producción final el denominador común es la calidad excelente del aceite que se pagará más caro de lo habitual según fuentes consultadas. La campaña finalizará a mediados de diciembre y los primeros aceites ya están en el mercado. En general, la producción nacional será muy baja con descensos de hasta el 60% respecto a la campaña anterior.

Aceites Noguero, entre las referencias más importantes del sector en la provincia, inició la campaña este lunes con cifras de producción de 500.000 kgs en variedades arbequina y empeltre (injerto) aunque en sus instalaciones -reforzadas con maquinaria nueva- se molturan todas, hasta Navidad, según informa Fernando Noguero. La calidad es “muy buena” y respecto a la cantidad “será insuficiente para necesidades del mercado entre distribuidores y clientes”. En cuanto a precios, “no hay olivas en toda España y los efectos se notarán porque el aceite se venderá más caro y si bien, no debería haber problema de demanda tampoco se asegura nada”.

La Cooperativa San Antonio comenzó hace una semana con cifras bajas y previsiones de 400.000 kgs hasta que finalice por Navidad según informa el gerente Antonio Campo. En la almazara se molturan todas las variedades con especial incidencia de empeltre y arbequina entre los 200 socios actuales. El precio del aceite ha ido al alza “desde agosto de 2015 no se había subido y se ha retocado lo menos posible pero no queda otra opción”, explicó.

En la almazara de Aceites Ferrer, que gestionan Sergio y Antonio Ferrer, en Bierge, la campaña comenzó el día 5 de octubre con previsiones de 300.000 kgs entre variedades alquezarana. negral y verdeña, entre las que predominan en la zona. La calidad del primer aceite Maestro de Bierge que se ha embotellado esta semana es excelente y la campaña finalizará comienzos de diciembre. La novedad significativa ha sido la visita de japoneses para ver de cerca las tareas de varear y la elaboración del aceite.

La campaña en almazara Ecostean que gestionan los hermanos Carlos y Luis Domínguez, comenzó hace una semana y las previsiones se limitan a 50.000 kgs para producir aceite de calidad muy buena elaborado con las variedades empeltre, arbequina y verdeña. El precio será más caro dentro de este “año tan complicado”.

En la almazara de Colungo, las tareas se iniciarán el próximo 7 de noviembre con expectativas de 50.000 kgs, entre las variedades arbequina, alquezarana y empeltre según informa Fernando Abadías, alcalde del Ayuntamiento, propietario de las instalaciones. La novedad principal es la nueva cooperativa vecinal con 12 socios para comercializar el aceite con marca registrada “La flor de Guara Somontano” a partir de enero de 2023. La inversión ha sido de 35.000 € con financiación del Ceder Somontano (30%). La producción se estima en 25.000 kgs en la cooperativa y 25.000 kgs para molturación de particulares.

En la cooperativa “La Unión” en Salas Altas la campaña se iniciará el 7 de noviembre con previsión de 40.000 kgs de variedades verdeña, empeltre y blanquilla hasta final de noviembre según informa Cosme Carpi quien se refiere al precio con una palabra “intocable”. Por último, en la almazara vecinal de Alquézar la campaña comenzó el lunes de esta semana con previsiones de 15.000 kgs con predominio de variedad alquezarana, según informa el alcalde Mariano Altemir, “la buena calidad salva del desastre”.