Santiago Lisa Pano: “Los del norte necesitamos una buena razón para sonreír”

La sonrisa es el lenguaje universal de las personas inteligentes. ¿Cree que sonreímos poco?

—Somos gente del norte y necesitamos una buena razón para sonreír. Es posible que tengamos carencias en comprensión emocional o un raro sentido del ridículo. Siendo conscientes de que una sonrisa de complicidad, siempre es un regalo.

¿Cuáles son sus criterios de selección de las personas?

—Me gustan las personas con compromiso social, humildad y respeto.

¿Se considera una persona polifacética o más bien, un todoterreno por todo lo que hizo y lo que hace?

—Los jóvenes con el espíritu de la constitución del 78, veníamos con muchas inquietudes, por ello he militado o colaborado activamente con asociaciones o grupos de lo más diverso.

En su etapa de concejal se preocupó por Medio Ambiente, pasó por Deportes, organizó Fiestas y se metió de lleno en Cultura… ¿Cómo se llega a todo?

—Fueron diferentes etapas y distanciadas en tiempo, afrontadas con mucha ilusión y compromiso. Los equipos municipales y el voluntariado, fueron vitales para la consecución de cada proyecto.

Además, recuperó Cien Años de Expresión Artística en Barbastro con obras de más de 50 artistas del último siglo…

—Fue un gran acontecimiento artístico y social, con más de 30.000 visitas, tras dos años de investigación y muchos contactos. “Por Amor al arte” también congrego a otros tantos artistas.

No me negará su inquebrantable voluntad por el arte como una parte de nuestra cultura…

—Existe una ilusionante esperanza de que el arte y la cultura actúen como musas seductoras reconduciendo la deshumanización, el individualismo y el daño terrible para el planeta. En lo personal es una debilidad que me llena.

¿Qué me dice del Acervo circular que también publicó?

—Acervo circular se compone de una selección de historias o poemas que representan, investigaciones, historias y vivencias, circunscritas en Barbastro, el Somontano y el alto Aragón.

¿Cómo agarró a La Gata Montés para meterla entre la colección de obras expuestas en la sala que tiene Buera?

—La Gata Montes, fuerte y sigilosa, es uno de los últimos felinos salvajes de España y Europa en peligro de extinción, al igual que las artes merece su reconocimiento y protección. La amplia muestra colectiva nace con la aspiración de dar a conocer las numerosas tendencias artísticas de actualidad y de proximidad.

¿Cómo se convence a tantos autores para que cedan obras para una sala de arte en un pueblo con 105 vecinos?

—Podríamos encuadrarlo, humildemente, en un espacio más de arte y naturaleza, independiente, pero capitaneados simbólicamente por el CDAN. Son numerosos los proyectos artísticos arraigados en nuestra provincia rural, bien en intervenciones diseminadas, espacios únicos o mostrando singulares creaciones. Es nuestro atractivo.

¿Qué tiene La Dama de Buera para que sea una leyenda?

—Una leyenda que recoge parte la historia mitológica de Alquézar y Buera, teniendo como protagonista la bella dama Pabla junto a su pueblo. Considerada una de nuestras leyendas regionales más poéticas y hermosas del país. Puede igualar en grandeza a los célebres Amantes de Teruel y superar a los sublimes rasgos de Agustina de Aragón y la condesa de Bureta. El turismo romántico es un valor en alza y aquí tenemos la historia.

¿Por cierto, el cura Cabrero, que es párroco de Buera, bien vale una misa?

—Por supuesto, si convirtiéramos Barbastro y el Somontano de Sobrarbe en una ínsula barataria o aldea gala, entronizaríamos por votación popular a José María, en cardenal papable.

¿El alcalde de su pueblo es una persona Lisa y llana?

—Voluntad y altruismo son los signos de identidad de los alcaldes de pequeños municipios, lisa y llanamente.

¿Los suelos empedrados de los patios de Buera son obras de arte y muestras de paciencia de los autores de este legado?

—Forman parte de los pavimentos ornamentales en el Somontano, un aprovechamiento de los recursos endógenos dotándolos de gran belleza. En ocasiones encierran o indican interesantes cargas energética derivadas de las corrientes telúricas.

Además, los de Buera presumen del excelente arte mudéjar en la ermita de Dulcis…

—Podemos decir que es un orgullo tener esta belleza de arquitectura mudéjar en Buera, contó con una gran hospedería, centro de peregrinajes del Camino de Santiago procedentes de Parzan, así como del Camino de San Vicente Mártir que transcurre de Roda a Valencia.

¿Se fía del gran reloj solar que hay en Dulcis o prefiere el suyo?

—Este curioso reloj oleícola del aljarafe es un guiño a la ciencia y la cultura del aceite. Un elemento singular por el diseño y enclavamiento. Es de fiar, no se le conocen retrasos.

¿El bosque de los olivos es ideal para perderse y aparecer en el Torno de Buera?

—El tiempo se detiene en el entorno de la ermita junto al bosque de los olivos, es un espacio muy especial donde se puede sentir la paz y escuchar el silencio.

¿Qué prefiere el aceite de Buera o el vino del Somontano?

—El vino del Somontano, sin lugar a dudas, entendiéndolo como arte y deleite.

Sentir sus tonos ligeros/con gran brillo y ternura/solo la nariz y el paladar /lo merecen.

—Acervo circular. El aceite está en desarrollo del embrión, aunque tiene mucho poso histórico y cultural en Buera.