Altas expectativas antes del inicio de la vendimia en Somontano

El inicio de tareas de vendimia en la D.O.P. Somontano tiene fecha, a partir del próximo 16 de agosto con grandes expectativas de buena campaña de recolección y una producción estimada superior a la campaña del año pasado que fue de 17.279.335 kilos de uva entre 15 variedades vendimiadas por 30 bodegas. En clave de buena sintonía, “en cuanto finalice el Festival Vino Somontano, el domingo próximo, pensaremos de inmediato en la vendimia”, señala Óscar Torres, director de Certificación del Consejo Regulador y entre quienes mejor conocen el estado de los viñedos.

“Este año, a diferencia del anterior, el aspecto general es mucho mejor y se entra en el final de maduración en variedades de ciclo corto como son chardonnay, gewurztraminer y merlot para comenzar la vendimia. Después seguirán tempranillo, syrah, cabernet sauvignon, riesling, garnacha blanca. Y se terminará con garnacha tinta, moristel y parraleta. La temperatura suave es ideal para el ciclo de maduración y si suben, el ciclo se acortaría”, indica Torres.

Se ha pasado el envero, fase del ciclo de la vid -dura unos 15 días- en la que el color se convierte en protagonista absoluto entre los viñedos. En esta fase, los racimos cogen tonalidades rojizas, azuladas o violetas, quedan atrás los matices verdes de la fase anterior de fructificación.

Se nota en los viñedos, “el envero es un punto crítico para nosotros y ahora queda la espera para que finalice el ciclo de maduración. Los técnicos de las bodegas deciden el inicio de la vendimia teniendo en cuenta el tipo de vino que se quiere producir”.

A partir de esta fase “entramos en la recta final del período de maduración”, relata. “A nivel general las bodegas plantean el inicio de vendimia a partir del día 16 de agosto, aunque la fecha definitiva la marcarán las condiciones climáticas y ambientales de los próximos días”.

Maduración

En el momento de maduración, “en la uva se producen una serie de cambios, físicos y bioquímicos, en los cuales los granos de uva continúan el aumento de tamaño, acumulan azúcares y se desarrollan multitud de componentes entre los que destacan los antocianos, polifenoles, aromas y otros”.

A la vista de la situación actual, “la producción de uvas será superior al año pasado, seguro, salvo que pase alguna situación muy extraña. De todas maneras, cuantificar el aumento es más complicado porque es pronto y dependerá mucho del tiempo que haga. La vendimia nos la marcará la climatología en los próximos dos meses”.

Las buenas expectativas se hacen extensivas a la calidad del producto, “salvo una catástrofe del tiempo, no creo que haya dudas. Los problemas más importantes se han superado y la producción pinta muy bien. En regadío, las cifras serán propias de un año bueno y en secano mucho mejores”. Las tareas de vendimia están mecanizadas casi al 90 % pero en diferentes labores hay un centenar de personas entre las bodegas”.

En las tareas de campo, previas a la vendimia, trabajan 370 viticultores, “en muchas ocasiones, la mano de obra familiar apoya en las explotaciones, las bodegas son mayores en superficies de viñedos y por tanto, hablamos de más de 500 personas en diferentes labores previas como son conducción de vegetación, tratamientos fitosanitarios, cubierta vegetal entre otras”.