Las Clarisas Capuchinas se quedan en Barbastro

Finalmente, la comunidad religiosa de las Hermanas Clarisas Capuchinas no va a abandonar Barbastro. Aunque el pasado mes de abril, las religiosas tomaron la decisión de cerrar el monasterio y trasladarse a otras comunidades, las “muestras de cariño” recibidas, así como el “acompañamiento” del Obispado de Barbastro-Monzón, les ha animado a seguir apostando por la que ha sido su casa durante más de tres siglos.

Así lo ha trasladado este jueves la Diócesis en un comunicado de prensa -en el que recuerda que las Hermanas Clarisas Capuchinas llevan 352 años de servicio en la ciudad-, después de que la abadesa, Florence Syombua Mwania, informara al obispo Ángel Pérez de que, finalmente, la comunidad religiosa continuará en Barbastro. La misma abadesa había anunciado en primavera la decisión de cerrar el convento debido a la avanzada edad de las tres únicas religiosas españolas de la comunidad, que se completa con cuatro keniatas de 35 años, y por la falta de vocaciones. 

Las siete religiosas habían elegido libre y personalmente a qué comunidad se incorporarían. Dos de ellas ya habían dejado el monasterio de Barbastro, aunque una regresó al tiempo. Por ello, ahora son seis las Hermanas Clarisas Capuchinas que residen en el cenobio que, por ahora, no va a cerrar sus puertas como se había anunciado.